Los cenotes de Valladolid, Yucatán, son ideales para quienes buscan el turismo de aventura, pues cuentan con atractivos que atrapan a los visitantes y los servicios que requieren durante su estadía.
La aventura puede comenzar en la misma ciudad, en pleno centro, en el cenote Zací, una formación subterránea “instagrameable”.
Esta cavidad es una de las más visitadas ya que se ubica a dos cuadras del centro de la ciudad, aunque también hay otros que en conjunto forman un circuito de deformaciones naturales.
En este cenote, en los últimos días fue notoria la presencia de un buen número de turistas que ingresaron al agua a bañarse.
Cenotes cerca de Valladolid, Yucatán
También se cuenta con los cenotes X-Kekén y Samulhá, en la comisaría de Dzitnup, en donde el boleto de entrada cuesta $226 que les da la opción de visitar ambos cuerpos de agua, los cuales han sido también concurridos.
Otra opción para quienes busquen visitar sitios de este tipo durante un fin de semana o en vacaciones próximas se encuentra en el municipio de Temozón y es el cenote Hubikú, cuyo precio de entrada es variable según la temporada, pues en ocasiones cobran $400, otras veces le bajan un poco, pero da derecho a la degustación de tequila, y un bufet con alimentos típicos de la región.
Las vacaciones de primavera o Semana Santa ya terminan, y las más próximas son las escolares, de julio, cuando se puede armar un circuito y conocer varias de las formaciones.
Cenotes de Yucatán, en los ojos del mundo
La belleza de los cenotes de la región cautiva a propios y extraños durante las vacaciones que este fin de semana llegan a su fin, donde incluso “influencers” han llegado para conocerlos y darlos a conocer al mundo.
Es tal la popularidad de las formaciones subterráneas que numerosos visitantes llegan solo para conocerlos y recorrerlos.
Cenote Zací, en el centro de Valladolid
Uno de los más visitados es el Zací, que se ubica a dos cuadras del centro de la ciudad, aunque también hay otros que en conjunto forman un circuito de deformaciones naturales.
La ciudad y los cenotes cercanos ya se puede observar a través de diversos canales de los “youtubers” e “influencers” que visitan la ciudad en recientes recorridos, incluso extranjeros como argentinos, rusos, quienes luego de grabar lo transmiten en sus canales de redes sociales.
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En un recorrido por la zona se pudo observar a los turistas recorrer el sitio y fotografiar a parte de la fauna que habita en el lugar, además de las formaciones rocosas y la belleza de los cuerpos de agua.
Los cenotes en cuestión se han convertido en sitios de interés turístico tanto local, regional, nacional incluso internacional, debido a la promoción turística que se ha hecho a lo largo de los años.
Precios para conocer los cenotes
El principal cenote y centro turístico es el Zací, ubicado en la calle 36 entre 37 y 39 en el centro de la ciudad, a donde se puede llegar caminando, y donde el cobro por la entrada al espejo de agua es de $60 adultos y $30 niños.
Al pagar, el visitante tiene derecho a un chaleco salvavidas y se cuenta con vestidores, baños gratuitos, pero además funciona un restaurante, en donde se ofrece comida típica de la región que tiene costos adicional de acuerdo al consumo de los visitantes, el cual también ha sido concurrido en este cierre de las vacaciones.
Además, en un área del parador se cuenta con más de 50 locales comerciales de artesanías, aunque los artesanos, entre ellos Mario Mex Cano, han señalado que las ventas no han sido las esperadas en estas vacaciones, debido a que el turista casi no llega hasta donde se encuentran, por lo que requieren de mayor promoción.
En este cenote, en los últimos días fue notoria la presencia de un buen número de turistas que se metieron al agua a bañarse y así disfrutar de la frescura del lugar.
Precio de los cenotes X-Kekén y Samulhá
Del mismo modo se cuenta con los cenotes X-Kekén y Samulhá, en la comisaría de Dzitnup, en donde el boleto de entrada cuesta $226 que les da la opción de visitar ambos cuerpos de agua, los cuales han sido también concurridos en estos días de vacaciones.
En el lugar se vive una experiencia en la que los visitantes que acudieron al ojo de agua pudieron estar en contacto con la naturaleza, además que pueden recorrer senderos naturales y estar sumergido en la fauna local como son la amplia variedad de los pájaros que habitan en los alrededores. También se les proporciona chalecos salvavidas a los visitantes.
¿Cómo llegar a los cenotes desde Mérida?
Tomando como punto de referencia esta ciudad, se puede llegar al lugar viajando tres kilómetros hacia la carretera a Mérida por la vía libre, luego dar vuelta a su izquierda y avanzar otros dos kilómetros hasta llegar al parador.
No obstante, también hubo otras alternativas que fueron igualmente visitadas por el turismo.
El cenote Suytún de Mendoza fue otro de los sitios de interés turístico, ya que se encuentra a escasos seis kilómetros de esta ciudad viajando sobre la carretera federal hacia Cancún.
Uno de los atractivos que más llamó la atención de los visitantes fue la plataforma de piedra que se encuentra en el centro, debido a que el lugar resulta un buen escenario para tomarse la foto del recuerdo, como lo hace la mayoría de los turistas que deciden disfrutar en este lugar durante estas vacaciones.
¿Cuánto cuesta visitar un cenote?
El boleto de entrada cuesta $250 solo por el acceso al cuerpo del agua, pero además se puede encontrar en el lugar un restaurante que ofrece alimentos a precios accesibles; también hay recorridos en bicicleta por los senderos, ya que el lugar se encuentra en lo que fue un rancho.
Otra opción para quienes busquen visitar sitios de este tipo durante un fin de semana o en vacaciones próximas se encuentra en el municipio de Temozón y es el cenote Hubikú, cuyo precio de entrada es variable según la temporada, pues en ocasiones cobran $400, otras veces le bajan un poco, pero da derecho a la degustación de tequila, y un bufet con alimentos típicos de la región.
Para llegar al lugar, desde esta ciudad, se puede hacer en auto, tomando la carretera que conduce a Tizimín, de tal modo que saliendo de Temozón, se da vuelta a la derecha y se circula por un camino de terracería de unos tres kilómetros hasta llegar a lo que fue un rancho e ingresar por un parador.— Juan Antonio Osorio Osorno