El ingreso de una persona ajena a la escuela secundaria “Agustín Vadillo Cicero” en Mérida, donde permaneció encerrado con estudiantes durante 40 minutos abordándolos con temas inapropiados, encendió alarmas en todo el sistema educativo de Yucatán.
A raíz de este incidente, escuelas de Valladolid y Tizimín reforzaron sus protocolos de seguridad para evitar situaciones similares.
Directores de escuelas coinciden en que, aunque existen protocolos de seguridad, el incidente en Mérida demuestra la necesidad de reforzarlos aún más.
El control estricto en los accesos y la supervisión del personal se han vuelto prioritarios para garantizar la seguridad de los estudiantes en todas las instituciones.
Refuerzan la seguridad en escuelas de Valladolid
En Valladolid, directivos de diversas escuelas reconocen que a pesar de los protocolos de seguridad, sobre todo en secundaria, aún pueden existir espacios vulnerables donde algún externo pueda ingresar.
Ante esa situación, fortalecieron la vigilancia en accesos, implementando filtros con prefectos, dobles rejas y monitoreo con cámaras de seguridad.
Además, mantienen comunicación constante mediante un grupo de WhatsApp para alertar sobre cualquier incidente.
Directivos de escuelas en Valladolid se mantienen comunicados
Rolando Cosgaya Coronado, subdirector de la escuela secundaria general “Antonio Mediz Bolio”, explicó que en la zona 07, a la que pertenece su plantel, todos los directivos están en un grupo de WhatsApp, incluyendo a los de otras escuelas de municipios del oriente del Estado, donde comunican cualquier problema detectado en sus respectivos planteles.
En el caso de su escuela, explicó que cuentan con una doble reja de entrada. Luego de pasar la primera, los alumnos se encuentran con un primer filtro de tres prefectos que supervisan el acceso y la salida.
Después deben cruzar la segunda reja, que cuenta con una puerta de herrería, siempre bajo la supervisión del personal directivo y los prefectos.
Además, realizan rondines en la periferia del plantel para verificar que todo esté en orden y, en caso de detectar alguna irregularidad, actúan de inmediato.
El subdirector recordó que, en una ocasión, una mujer logró ingresar al área de estacionamiento del personal docente para vender pulseras.
Al ser descubierta, argumentó que lo hacía por necesidad económica, pero tuvo que ser retirada del plantel. Desde entonces, no han tenido incidentes similares.

Vigilancia en la secundaria “Antonio Mediz Bolio”
El plantel cuenta con el apoyo de una trabajadora social, tres prefectos, intendentes, una bibliotecaria y personal de Apoyo a los Servicios Educativos Complementarios, además de una psicóloga y agentes de la Policía Municipal que vigilan en los horarios de entrada y salida.
Cosgaya Coronado reconoció que, a pesar de todas las medidas de seguridad, aún pueden existir espacios vulnerables, por lo que se trabaja con todo el personal para reforzar la vigilancia.
De hecho, hoy viernes sostendrán una reunión para reiterar estas medidas tras lo ocurrido en Mérida.
Agregó que la comunidad estudiantil, integrada por casi 700 alumnos, está educada para reportar cualquier irregularidad dentro del plantel a los directivos, quienes toman medidas inmediatas.
Asimismo, recordó que en la escuela hay cámaras de vigilancia, cuyos monitores están en la oficina del director, Ricardo Sabido Balam, y son verificados constantemente.
Vigilan a alumnos incluso a la salida de las escuelas
Se precisó que el hecho de que los alumnos salgan a la hora de la retirada no significa que el plantel se desligue de ellos. Si algún padre de familia reporta un incidente ocurrido fuera de la escuela, los directivos toman cartas en el asunto.
A la hora de entrada y salida, todo el equipo directivo se encuentra en la puerta para despedir a los alumnos, además de cubrir todos los accesos para supervisar quién los aborda y exhortarlos a dirigirse directamente a sus casas. Si detectan algo extraño, lo reportan de inmediato.
En la escuela secundaria estatal “José Inés Novelo” se intentó dialogar con el director, pero se informó que estaba en una reunión. Aunque ofreció devolver la llamada, hasta el cierre de esta nota no lo había hecho.
En ese plantel se observó que en la entrada hay un filtro donde el personal aborda de inmediato a los visitantes para preguntar el motivo de su presencia, sin permitirles avanzar al interior de la escuela.
En la escuela secundaria técnica No. 6, se verificó que, a unos metros de la reja de acceso —que permanece cerrada—, hay un cubículo donde una prefecta supervisa la entrada y no permite el paso a nadie.
Incluso cuando alguien solicita ingresar por algún trámite, debe esperar afuera hasta que un directivo se acerque a la puerta para atenderlo.
Protocolos escolares más estrictos en Tizimín
En Tizimín, las medidas de seguridad también se han intensificado. Por ejemplo, la primaria Manuel Alcalá y Alcalá restringió la salida de los alumnos sin la presencia de un tutor.
Por su parte, secundarias como la “Jacinto Canek” y la “Miguel Barrera Palmero” endurecieron sus requisitos de ingreso, exigiendo documentación oficial para cualquier persona ajena al plantel.
Directores de instituciones educativas coincidieron en que cada escuela lleva un control de acceso para asegurar que solo personas autorizadas puedan ingresar a las instalaciones, pero tras lo ocurrido también se ha acordado en intensificar esas medidas.

En primaria piden a padres acudir puntuales por sus hijos
De hecho, en la primaria Manuel Alcalá y Alcalá, ubicada en el centro, personal directivo envió un comunicado a todos los maestros y a su vez a los tutores para que acudan puntualmente a buscar a sus hijos en la salida de clases.
Como justificación explicaron que era con motivo de la feria que se desarrolla en la ciudad, pues hay gente foránea y buscaban mantener la seguridad de los alumnos.
Inclusive desde entonces, el acceso del plantel se mantiene en resguardo y no permiten el acceso de padres de familia así como tampoco dejan salir al alumno si no está el tutor presente.
Medida en secundaria para evitar que ingresen extraños
Por su parte el profesor Eloy Cetzal Dzul director de la escuela secundaria “Jacinto Canek”, dijo que por experiencias pasadas nunca dejan pasar a alguien que no presente documento oficial de la Segey.
También recordó que hace muchos años, un sujeto quería ingresar diciendo que venía del ayuntamiento de Tizimín a una plática y resultó ser que el oficio era falso.
Desde entonces precisa que se han aplicado disposiciones que les han ayudado mucho y aunque sea una causa noble, no los dejan pasar tan fácil.
“Ya tenemos algún tiempo de tener a un elemento fijo que está en la puerta de la escuela y que canaliza a los que llegan siempre y cuando sea padre de familia o alguien ajeno siempre y cuando tenga la autorización”.
Filtro de seguridad en secundaria de Tizimín
El maestro William Guerrero Alejos, director de la escuela secundaria Miguel Barrera Palmero, dice que existe un protocolo de seguridad, pero con lo ocurrido en Mérida están ahora más pendientes.
Para ello, agregó, tienen su filtro y si llega alguien desconocido le piden oficio sellado por la secretaria de educación o de alguna autoridad correspondiente.
Añadió que solo por la puerta principal se atiende esos casos y no dejan que entren por los demás accesos que sirven para los alumnos.
