En lo profundo del templo de Taposiris Magna, un descubrimiento fascinante podría estar a punto de desvelar uno de los mayores misterios del antiguo Egipto.
Durante una reciente excavación, la arqueóloga Kathleen Martínez ha hallado un pasadizo secreto conocido como el “Milagro geométrico”, que podría llevarnos finalmente a la tumba perdida de Cleopatra.
Este túnel, con más de 1305 metros de longitud y dos metros de altura, está construido principalmente con piedra y arenisca. Aunque gran parte de su estructura permanece sumergida y su propósito exacto aún es incierto, los expertos creen que podría contener las pistas definitivas para localizar la tumba de la legendaria reina egipcia.

Según el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto, el diseño del túnel guarda una notable similitud con el de Apheteleion en la isla griega de Samos, lo que sugiere un significado especial.
En 2020, Zahi Hawass, exministro de Antigüedades de Egipto, descartó la posibilidad de que la tumba de Cleopatra, la última reina egipcia, se encontrara en Taposiris Magna.
Este extenso sitio arqueológico, que abarca unos siete kilómetros de longitud, fue un importante complejo religioso y un bullicioso centro comercial desde el siglo III a.C. hasta el siglo VIII.

A su puerto llegaban barcos directamente desde Grecia, lo que subraya su relevancia en la antigüedad.
Kathleen Martínez ha dedicado 20 años de su vida a esta búsqueda, convencida de que el “Milagro geométrico” podría ser la clave para encontrar la tumba de Cleopatra.
El templo de Taposiris Magna, erigido alrededor del 280 a.C. por Ptolomeo II, fue dedicado a Osiris e Isis, deidades profundamente veneradas. Cleopatra, quien buscó identificarse con Isis durante su reinado, podría haber elegido este lugar como su último refugio.

La conexión se refuerza con el hallazgo de monedas con el nombre de Cleopatra y pozos funerarios de estilo greco-romano, encontrados a lo largo del túnel, que podrían señalar la cercanía de tumbas importantes, posiblemente de Cleopatra y su esposo Marco Antonio.
El próximo paso en esta apasionante investigación es la exploración del Mar Mediterráneo.
Los terremotos ocurridos entre los años 320 y 1303 d.C. hicieron colapsar partes del templo, sumergiéndolas bajo el mar.

En 2009, Zahi Hawass declaró: “El hallazgo de la tumba de Cleopatra y Marco Antonio sería un hito sin precedentes en el siglo XXI. Incluso si no encontramos la tumba, ya hemos revelado descubrimientos significativos en este sitio, tanto dentro como fuera del templo.”
