Una distinción para Yucatán
Con la declaratoria de Yucatán como Estado de la Paz concluyó ayer la XVII Cumbre Mundial de Premios Nobel de la Paz, después de tres días en los que se debatieron temas como seguridad, educación, sustentabilidad y diversidad sexual.
“Yucatán, después de esta cumbre, es un estado diferente. Aquí se ha dialogado, discutido todos los temas y es algo que me llena de orgullo”, expresó el gobernador Mauricio Vila Dosal tras recibir el reconocimiento.
“Esto no es un reconocimiento al gobierno, es un reconocimiento para todos los yucatecos”, indicó para luego destacar que el nombramiento será un recordatorio viviente no solo de la cumbre sino también del legado de todos los laureados con lo que han dicho y platicado para la construcción de paz.
En la ceremonia estuvieron todos los premios Nobel que participaron en la cumbre, pero fue la liberiana Leyma Gbowee, ganadora en 2011 por encabezar el movimiento que puso fin en 2003 a la guerra civil de su país, quien leyó la declaratoria final de la XVII Cumbre y en la que se hizo mención a Alfonso García López, hasta ahora el único mexicano ganador del Nobel de la Paz.
En la declaratoria quedó plasmado que la ausencia relativa de la guerra se ha confundido como un logro de paz. “Mientras las libertades básicas sean flageladas y exista la corrupción, violencia, pobreza extrema, inequidad y discriminación no puede existir paz verdadera”, apuntó.
Proclamó que la verdadera paz no puede separarse del logro de la verdadera justicia. “Estamos profundamente preocupados por las amenazas a la paz a la justicia social y la sustentabilidad global y las futuras generaciones”.
En la declaratoria también se hizo un llamado para el cuidado al medio ambiente y a que los ciudadanos participen en la construcción de un mundo más justo, pacífico y sostenible, así como para proteger a las personas, principalmente a niños y mujeres, de la violencia, a que los países adopten nuevas estrategias para el problema de las drogas, para que se garantice educación de los pueblos indígenas en su lengua nativa y a proteger la libertad de expresión.
Llamado
Los jóvenes, que en esta cumbre tuvieron un papel primordial, igual leyeron una declaratoria en la que pidieron que los indígenas sean respetados y valorados como cualquier ser humano, que las personas decidan con quieren vivir o casarse pues los derechos humanos no son negociables, erradicar la pobreza, y establecer un tribunal internacional ambiental para que quienes dañan el medio ambiente sean penalizados.
En la clausura se aprovechó para entregar los premios Turner por Cambio Social y Amor Preventivo por Activismo Juvenil. El primero lo recibió el joven Mohamed Al Joundi, por apoyar a niños de Siria que no tienen acceso a la educación, y el segundo, la mexicana Saskia Niño de Rivera por su proyecto para prevenir el crimen y la delincuencia en su comunidad. Ambos fueron presentados por Jody Williams, ganadora del Nobel en 1997.
Igual se entregó el premio “Deja tu huella por la paz” al empresario José Manuel Díaz Rubio, por el proyecto del barco “Zamná”.
Medallas
Y se entregaron las medallas “Impacto social” al cantante Miguel Bosé; la “Activismo social” a la sudafricana Mary Shuttleworth, y el premio Cumbre de la Paz al cantante Ricky Martin, quien fue largamente ovacionado por los presentes, quienes incluso se pusieron de pie para aplaudirle y tomarle fotos.
El mensaje del cantante, quien posteriormente ofreció un concierto en el Monumento a la Patria, del que damos cuenta en la sección de Imagen, fue el más ovacionado de la clausura sobre todo por referirse a los derechos de la comunidad LGBT.
“La educación no es un fin, es el trayecto que nos conduce al entendimiento y el respeto de que todos los habitantes de este planeta tenemos los mismos derechos. No importa nuestra raza, origen, orientación sexual y creencias que deben ser respetadas por todos los gobiernos”, dijo, ganándose múltiples aplausos.
Respeto
“Mi comunidad LGBT, que pesar de sus grandes talentos, significativas aportaciones en todo el quehacer humano, forjadores de extraordinarias iniciativas que han creado soluciones transformadoras con beneficio colectivo, siguen siendo objetivo del crimen y el rechazo y de las absurdas creencias producto de prejuicio y desconocimiento. La igualdad, el respeto y la tolerancia tienen que ser parte de nuestra vida, el derecho de cada ser humano a vivir libremente tiene que ser respetado. Hay lugar para todos, pero para lograr la paz, primero tenemos que luchar por nuestro derecho a vivir en libertad. Como miembro de la comunidad LGBT no estamos pidiendo más derechos que el resto de los ciudadanos, tampoco queremos tener menos derechos, simplemente queremos igualdad”.
En la clausura también dirigieron sendos mensajes Michelle Fridman, secretaria estatal de Turismo; Ekaterina Zagladina, presidenta de la Cumbre, y la secretaria general de gobierno, María Fritz Sierra, en representación del gobernador, quien llegó después por acompañar al presidente López Obrador a su gira por varios municipios.— Iván Canul Ek
Galardón Activismo social
Ayer se entregó el premio Cumbre de la Paz al cantante puertorriqueño Ricky Martin.
Dedicatoria
El artista dijo que el reconocimiento lo recibía a nombre de cientos de abolicionistas modernos “que me acompañan alrededor del mundo, quienes entregan su vida por la lucha de los derechos humanos y abogan por las víctimas de la esclavitud moderna”.
No a la indiferencia
“Hago un llamado a todos para que dejemos de aceptar la crisis humanitaria como parte de nuestro diario vivir. No podemos ser víctimas de la indiferencia, no lo vamos a permitir. Todos debemos de luchar para dejar un mundo libre de opresión para nuestros hijos y hermanos”.
