“La baja incidencia de violencia criminal en Yucatán no debe equiparse con la paz”, afirmó la doctora Shannan Mattiace, investigadora del Allegheny College, durante su ponencia en el Foro de Seguridad y Justicia que se llevó al cabo ayer en la Universidad Marista.

Organizado por el Centro de Investigación y Acción Social (CIAS por la Paz) y la Unión Social de Empresarios de México (Usem) Mérida, el evento reunió a representantes de organizaciones de la sociedad civil, empresarios y miembros de la Arquidiócesis.

En la bienvenida, Génner Peniche Castro, de CIAS por la Paz, subrayó que con el foro se busca dar una respuesta sobre qué se puede hacer frente a la violencia que se vive en el país.

El acto fue presidido por el arzobispo de Yucatán, monseñor Gustavo Rodríguez Vega; el rector de la Universidad Marista, Ermilo Echeverría Castellanos; Alfonso Páez Martínez, presidente de Usem Mérida, y el sacerdote Eugenio Gómez Díaz Barriga, de la comunidad jesuita de Mérida.

“Gracias por responder a esta convocatoria de un tema que hoy por hoy es muy sentido en todo México, quizá no tanto en Yucatán, pero sabemos que somos parte de esta realidad mexicana y nos preocupa lo que sucede en tantas ciudades, donde hay demasiada violencia y demasiada inseguridad”, señaló el arzobispo.

También hay violencia intrafamiliar y es preocupante la descomposición de los ambientes sociales, indicó. “Es necesario sumarse a la gente que se preocupa de la situación y que tiene algo que aportar para construir la paz”

Foro de Seguridad y Justicia en Mérida

En el Foro de Seguridad y Justicia organizado por el CIAS por la Paz y Usem Mérida, el rector de la Universidad Marista, Ermilo Echeverría Castellanos, destacó la importancia de transformar a la sociedad y que sea mas justa, más responsable y más solidaria.

En su turno, Alfonso Páez Martínez, presidente de Usem Mérida, señaló que el foro es una gran oportunidad de platicar sobre las situaciones que se están viviendo hoy día y que uno no quisiera pensar.

“Nos abre la oportunidad a todos de venir a colaborar, a decir lo que pensamos y trabajar en conjunto para encontrar una solución”, indicó el dirigente.

Explicó que el foro es uno de los más de 30 que se realizarán a lo largo del país, siendo la última sede Puebla, donde se recopilarán los hallazgos de todos los foros para poder desarrollar una estrategia que ayude a mejorar la situación del país.

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El último en tomar el micrófono fue el sacerdote Eugenio Gómez Díaz-Barriga, representante de la comunidad jesuita de Mérida, quien resaltó que el diálogo es importante para construir agendas comunes que busquen la seguridad y justicia en el país.

Recordó el asesinato, el año pasado en Chihuahua, de tres sacerdotes jesuitas, lo que, dijo, marcó el inicio de un movimiento en el país.

Yucatán, ¿exento de la violencia criminal?

Después de los mensajes, siguió la participación de la doctora Shannan Mattiace, investigadora del Allegheny College, con la ponencia “Yucatán: una excepción nacional en el área de violencia criminal y destino para ‘migrantes de seguridad’”.

La doctora, quien ha realizado estudios sobre violencia en la entidad, dijo que Yucatán vive una realidad singular en comparación con otras entidades.

Ante el planteamiento de por qué es más prevalente la violencia criminal en algunos lugares de México que otros, la doctora señaló que “una explicación sugerente es la de la cohesión social: por tener una población tan grande se ha podido contener la violencia”.

También resaltó que si bien la tasa de homicidios en Yucatán es baja, hay otros tipos de violencia como la doméstica y la tortura policiaca, que llaman la atención a nivel nacional.

El presbítero Eugenio Gómez Díaz-Barriga en su intervención. Le acompañan en la mesa monseñor Gustavo Rodríguez Vega; Ermilo Echeverría Castellanos, rector de la Universidad Marista, y Alfonso Páez Martínez, presidente de Usem Mérida. Enfrente, los obispos auxiliares Mario Medina Balam y Pedro Mena Díaz

Asimismo, mencionó que la violencia en Yucatán ha sido contenida gracias a estrechas relaciones intergubernamentales entre los niveles de gobierno (federal y estatal), así como entre las agencias de seguridad.

La ponente destacó el trabajo de los periodistas en México, donde hacer periodismo es peligroso.

“No quiero dejarlos con la idea de que no pasa nada en Yucatán. La verdad es que yo quiero mucho a Yucatán y Mérida, y sí creo que en parte son un paraíso, pero quizá para personas de clase media, alta, profesionistas, que tienen recursos…

“Pero no para los que están sufriendo tortura policiaca y para muchísimas mujeres que están en relaciones de mucho abuso”, recalcó.

Yucatán, bajo el foco por la violencia contra las mujeres

Dijo que Yucatán ocupa el sexto lugar de violencia contra las mujeres, y el séptimo en violencia de pareja.

“Eso es grave, vemos una tendencia al alza de homicidios de mujeres en Yucatán y en el abuso sexual, y son áreas que merece la pena trabajar con mucho más cuidado”, indicó.

También destacó el trabajo de los periodistas en México.

“Es de los periodistas donde nosotros podemos entender lo que está pasando en el país. Están bajo muchísima amenaza. Ustedes saben que México es el país más peligroso para ser periodista, es una cosa realmente alarmante”, dijo la doctora Mattiace en su intervención.

La experta destacó la labor de Diario de Yucatán y de su periodista Hernán Casares Cámara, quien por iniciativa propia se acercó a la investigadora para hablar sobre seguridad en Yucatán, migración y criminalidad.

Después de la ponencia se llevó al cabo una mesa panel con la participación de representantes de Casa Crisal, Feyac y Pastoral Penitenciaria, y, posteriormente, mesas de diálogo sobre Seguridad, Justicia, Tejido social y construcción de paz, y Pueblos originarios, territorio y medio ambiente.

Jorge Iván Canul Ek es licenciado en Periodismo y Ciencias de la Comunicación y actualmente reportero de la Agencia Informativa Megamedia. Tiene 22 años de trayectoria en los medios, y es colaborador...