Aunque Yucatán no figura en la reciente alerta de viaje que Estados Unidos emitió por riesgo de terrorismo en 30 estados del país, las repercusiones para el turismo local son inevitables, según advierte el presidente del Consejo Empresarial Turístico de Yucatán (Cetur), Jorge Carrillo Sáenz.
“Definitivamente, desde que salga un anuncio de que no visiten México, pues es una alarma negativa para que el turista venga al país”, señaló. Y, aunque Yucatán se mantiene como uno de los más seguros, muchos viajeros extranjeros realizan recorridos por varias entidades, y la inclusión de ciertos destinos en la alerta inhibe que México sea considerado como opción de viaje.
En ese sentido, el impacto indirecto para Yucatán se traduce en menos visitantes de mercados clave como Estados Unidos y Europa. “Al estar algunos de esos estados como no recomendables para que visiten, aquí en el país, pues eso nos limita que solamente vengan a Yucatán”, lamentó.
Carrillo Sáenz detalló que actualmente el 61% del turismo en Yucatán es nacional, mientras que los visitantes provenientes de Estados Unidos representan un 17%, Europa el 14% y Canadá el 4%. El reto, dijo, está en depender menos del turista nacional, que ha disminuido su presencia en parte por los altos costos de transporte aéreo y la inseguridad en las carreteras.
“Un boleto de avión de Mérida a México o México a Mérida te cuesta alrededor de 9,000 o 10,000 pesos. Pon tú que son tú, tu esposa y tus hijos, son 40,000 pesos solamente por estos aviones”, comentó.
A eso se suman otras complicaciones. “El segundo problema de ahorita venir por carretera es que hay tramos de Atasta, que viene estando entre Tabasco y Campeche donde están reportando muchos asaltos”, afirmó.
Frente a este panorama, el sector turístico yucateco se ha enfocado en promover el destino en mercados extranjeros. “Lo que hemos estado buscando es no depender tanto del turismo nacional..., sino, en ese caso, el turismo extranjero, buscar que tuviéramos más vuelos de Estados Unidos hacia acá”, explicó el dirigente empresarial.
Sin embargo, la alerta estadounidense representa un nuevo obstáculo. “Nos topamos ahora con algún tipo de recomendaciones, con estas alertas de que no visiten México. Entonces, por supuesto que nos afecta, es un hecho”, recalcó. Aclaró que para muchos extranjeros resulta difícil distinguir los estados mexicanos afectados, por lo que deciden evitar el país en su totalidad.
“Es como por ejemplo, te voy a decir, no es que yo no sepa dónde están, pero que te digan: ‘Oye, hay una alerta en los estados de Wyoming, de Colorado, de Alabama… ¿y eso dónde está?’, en Estados Unidos, pero dónde… Entonces, esa es la afectación que tenemos. Colateralmente sí nos afecta”, sostuvo.
De hecho, Cetur prevé una baja de afluencia de turistas estadounidenses en la temporada de invierno. “Muy probablemente resintamos alguna baja por estos temas de las alertas que están viendo y que definitivamente no ayudan”, indicó. En contraste, confía en que el turismo canadiense mantenga su flujo, dado que muchos visitantes de ese país llegan específicamente a Yucatán durante los meses fríos, entre noviembre y marzo.
Frente a este panorama, el sector ha intensificado su apuesta por el turismo interno. “Justamente lo que hemos estado haciendo es incentivar o impulsar ese turismo que se anunció hace como un mes, el turismo interno, es decir, que los mismos yucatecos visiten Yucatán”, dijo. La campaña actual incluye 17 rutas turísticas dentro del estado, buscando promover ciudades coloniales como Izamal, Valladolid y Motul.
Lenguaje
Por su parte, desde la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y el Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), se criticó el lenguaje empleado en la alerta emitida por EE.UU., particularmente el uso del término “terrorismo”.
“La inclusión del término ‘terrorismo’ en esta alerta no refleja con precisión la situación de la mayoría de los estados mexicanos”, subrayaron ambas organizaciones en un comunicado conjunto. Advirtieron que una narrativa de este tipo “puede distorsionar la percepción internacional” e impactar no sólo al turismo, sino también a la inversión extranjera.
Coparmex y el CNET urgieron al gobierno federal a implementar una estrategia coordinada de comunicación que transmita con claridad que “los destinos turísticos de nuestro país son seguros y están libres de amenazas terroristas en el sentido internacional del término”.
La propuesta incluye una campaña internacional de relaciones públicas, respaldada por datos verificables, que proyecte una imagen sólida y confiable de México en mercados estratégicos como Estados Unidos, Canadá y Europa.
