Ligia Canto Lugo, mamá de Emma Gabriela, acudirá a Tabasco para constatar la muerte de Martín Medina Sonda y poder notificar a sus nietos. Aquí una cronología del feminicidió que cimbró a Yucatán.
Ligia Canto Lugo, madre de Emma Gabriela Molina Canto, informó que ha solicitado a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Yucatán y a la Comisión de Atención a Víctimas de esta misma entidad, apoyo para acudir al estado de Tabasco a certificar la muerte de Martín Alberto Medina Sonda, quien fuera sentenciado a 50 años de prisión por el feminicidio de su hija.
Si bien no declaró que haya dudas o sospechas en cuanto a la veracidad de la información, comentó que necesita tener información real para poder dar la noticia a sus nietos, hijos de Emma Gabriela y el mismo Martín Alberto.
“Es algo necesario, humanamente necesario, para poder darles la información a mis nietos de que ya lo vi y que así es”, comentó la señora Canto Lugo al explicar las razones por las que viajaría a Tabasco este miércoles.
Para ello solicitó al fiscal general de Yucatán su intervención y pida a la Fiscalía de Tabasco las facilidades para poder confirmar el hecho “y de ser posible con peritos externos para poder confirmar que es esta persona”, comentó.
Ligia Canto dijo, también, que el juzgado de ejecución no le había notificado oficialmente la muerte de Martín Alberto, por lo que desconocía si las autoridades del Cereso de Tabasco ya habían notificado al juez sobre el deceso.
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La licenciada Celia Maldonado Yañez, de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV), indicó que ya las instituciones como la Fiscalía y la misma CEAV se han comunicado con sus homólogos de Tabasco para permitir la diligencia que pretende realizar la señora Ligia Canto Lugo para confirmar la muerte de Martín Alberto Medina Sonda.
Final de Medina Sonda reaviva las deficiencias en la justicia en Yucatán
La muerte en prisión de Martín Alberto Medina Sonda, autor intelectual del feminicidio de Emma Gabriela Molina Canto, trae de nuevo a la actualidad la falla del sistema y el desinterés de autoridades para garantizar justicia plena en casos de feminicidio en Yucatán.
El nuevo capítulo del caso, al confirmarse el fallecimiento del condenado mientras purgaba su pena, reabre preguntas sobre impunidad, la protección de las víctimas y la certeza de la reparación del daño.
Corrupción y omisiones
La historia que terminó —por ahora— con la muerte del condenado muestra episodios de presunta manipulación de poder, retrasos judiciales y recursos legales que extendieron el proceso durante años, hasta que la sociedad y la familia de la víctima tuvieron que insistir para mantener el caso en la agenda pública.
La madre de Emma Gabriela y activistas denunciaron en distintas ocasiones la larga batalla para obtener protección y el acceso a la justicia.
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Cronología: feminicidio de Emma Gabriela Molina Canto
- 2012 (25 de mayo): Según registros locales, durante el conflicto con su entonces esposo, agentes judiciales de Tabasco detuvieron a Emma Gabriela en Yucatán y la trasladaron bajo cargos que ella denunció como falsos; en ese contexto el padre de sus hijos los retuvo en Tabasco, lo que desató un largo litigio familiar.
- 2014: El litigio y confrontaciones entre las partes derivaron en la detención de personas y en el rescate de los menores, según las versiones periodísticas que relatan los episodios previos al crimen.
- 27 de marzo de 2017: Emma Gabriela Molina Canto fue asesinada a las puertas de su casa en el fraccionamiento San Luis, en Mérida; el hecho conmocionó a la sociedad yucateca.
2019: En un juicio oral el Tribunal Primero dictó sentencia: fueron condenados los autores materiales y Medina Sonda fue encontrado culpable como autor intelectual y sentenciado a 50 años de prisión. - 2021 (mayo): El Tribunal Superior de Justicia confirmó las penas —paso clave en el proceso— aunque la defensa promovió recursos de amparo y apelaciones que prolongaron el expediente.
- 2022–2023: La familia de la víctima siguió litigando aspectos relacionados con la guarda y custodia de los hijos y con la reparación del daño; en mayo de 2022 la abuela materna obtuvo la custodia definitiva de los menores. La madre de Emma continuó reclamando atención y garantías.
- 26 de agosto de 2025: Se confirma la muerte en prisión de Martín Alberto Medina Sonda, recluido en el penal de Villahermosa, Tabasco; el gobernador Javier May informó que todo apunta a un suicidio, y las autoridades iniciaron las indagatorias correspondientes.
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Qué sigue: la ley y la reparación del daño
De acuerdo con especialistas y con la interpretación del Código Penal del Estado de Yucatán, la muerte de una persona sentenciada extingue la acción penal contra el imputado, pero no extingue la obligación de reparación del daño ni las medidas de decomiso relacionadas con el delito.
En los hechos, ello implica que, aunque el proceso penal contra Medina Sonda quede formalmente concluido, los familiares pueden seguir buscando la reparación civil y el cumplimiento de otras responsabilidades patrimoniales que hubieran sido impuestas.
El centro penitenciario debe notificar al juez de ejecución para que determine los pasos a seguir y coteje el acta de defunción.
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Balance y reclamo público
Para la familia de Emma Gabriela y para colectivos que acompañan casos de violencia de género, la noticia de la muerte del sentenciado es ambivalente: alivia la posible repetición de impunidad penal, pero deja pendientes las respuestas institucionales sobre cómo se permitieron las fallas y qué mecanismos se implementarán para evitar que otras víctimas enfrenten procesos tan largos y dolorosos.
Las voces que han exigido justicia advierten que mientras no haya mecanismos concretos de prevención, protección y reparación, seguirán denunciando la desatención.— Hipólito Pacheco / Gabriel Chan Uicab