CIUDAD DE MÉXICO.- Morena y sus aliados aprobaron votar como de “urgente resolución” y con dispensa de trámites, una reforma para garantizar que los títulos de asignación de vías férreas “deben mantenerse siempre en manos del Estado y debe existir una temporalidad indefinida de éstos”.
La iniciativa, que se aprobó por 264 votos de Morena, PT y PVEM, y 216 sufragios en contra del PRI, PAN, PRD y MC, es considerada por la oposición como una estrategia para facultar al Ejército la operación del Tren Maya de forma indefinida.
Esta aprobación de la Cámara de Diputados significa que la empresa perteneciente al Ejército Mexicano, Grupo Aeroportuario, Ferroviario y de Servicios Auxiliares Olmeca-Maya-Mexica S.A. de C.V., tendrá el control total del Tren Maya.
Es decir, en la reforma aprobada se avaló que quien ostente el cargo de Presidente de la República podrá asignar directamente a entidades paraestatales la prestación de servicios públicos, así como el uso, aprovechamiento y explotación de bienes de forma indefinida.
Una vez que sean asignadas las actividades antes mencionadas, éstas no podrán cederse o transferirse bajo ningún título y sólo podrá hacerse cuando se acredite que no existe utilidad o interés público, general, social o razones de seguridad nacional que así lo demanden.
Puntualiza que el Ejecutivo federal estará facultado para otorgar asignaciones, así como determinar que el título de asignación de vías férreas a favor de entidades paraestatales “tendrá una vigencia indefinida”.
Se define que en ningún caso, la asignación podrá cederse o transferirse a particulares, y “solo podrá cancelarse cuando se acredite fehacientemente que no existe utilidad o interés públicos, general, social o de seguridad nacional que lo justifiquen”. Tras su aprobación en lo general y en lo particular, se turnó a la Cámara de Senadores.
Reacciones en contra
“El gobierno pretende ceder para siempre la administración del Tren Maya al Ejército, la militarización no es la solución, no estamos es contra del Ejército ni de la Sedena, al contrario, reconocemos su labor, pero este gobierno vulnera su prestigio”, señaló Julieta Mejía de Movimiento Ciudadano.
Por su parte, tanto las bancadas del PAN como del PRI acusaron que la reforma limita la competencia y abre el control exclusivo del Estado mexicano.
