TIZIMÍN.- Un trágico amanecer de lunes tuvieron dos familias, una en Calotmul y la otra en el Centro de la cabecera municipal, al perder a un integrante de su familia.

En el primer hecho, el joven José Rodrigo M.C. -de 32 años de edad- se quitó la vida en su domicilio ubicado en la calle 25 x 28 y 30 de Calotmul. 

El trágico hallazgo fue descubierto por su pade Mauro M. D. -de 63 años- quien dijo a la policía que a las 9 de la mañana fue a despertar a su hijo para desayunar, pero encontró la puerta cerrada bajo llave. 

Al no obtener respuesta decidió forzar la entrada y se encontró de frente con su hijo sin vida. 

Paramédicos de la Policía Municipal cumplieron con el protocolo de los primeros auxilios, corroborando que el joven ya no contaba con signos vitales.

Como es de rigor, al domicilio se presentó personal de la Fiscalía General del Estado para tomar conocimiento del hecho y cumplir con las diligencias de rigor correspondientes. 

Por su parte el sexagenario no daba crédito de lo sucedido, toda vez que desconoce la razón que llevó a su hijo a tomar esa decisión. 

Abuela no despierta en casa

Por otro lado, en el centro de Tizimín, una abuelita falleció durante la madrugada en la casa que habitaba sobre calle 49-A x 40 y 42 de la colonia centro. 

Eelementos de la Policía Municipal y paramédicos de la Cruz Roja, pero no pudieron hacer nada para salvarla. 

De acuerdo con el reporte, a las 3:30 de la madrugada se solició el apoyo de los elementos por parte de Luis Gabriel M. P. -de 23 años de edad-, quien dijo que su abuela Engracia M. G. de 72 años se encontraba inconsciente.

Los uniformados solicitaron con carácter de urgente la presencia de los socorristas de la benemérita institución, quienes al llegar solo pudieron corroborar el fallecimiento.

Se determinó la causa de muerte de la septuagenaria como  patológica, por lo que al lugar llegaron elementos de una funeraria que atenderían la cristiana sepultura.- POR ISAURO CHI DIAZ