VALLADOLID.— Carlos Guillermo Aguirre Aguilar, presidente de la Asociación de Restauranteros y Servicios Gastronómicos de Valladolid (Reserva), manifestó que en el municipio de Chichimilá se registra un fenómeno relacionado con la emigración a Quintana Roo.
Según dice, la gente, luego de trabajar algunos años en distintos destinos turísticos de Quintana Roo, regresa, invierte y genera empleos y derrama económica en su comunidad.
Aguirre Aguilar recordó que hace algunos años, muchos de los yucatecos, sobre todo de la zona oriente tuvieron el sueño de emigrar a la Riviera Maya y Cancún, luego Tulum, en Quintana Roo, para trabajar, debido a que en esos lugares se ganaba muy bien comparado con lo que se podía obtener en su comunidad y esta ciudad.
Muchos jóvenes decidieron aventurarse en Quintana Roo para trabajar, incluso una gran parte de ellos se casó y formó una familia en ese lugar, pero no solo de Chichimilá, sino de varios municipios del oriente del Estado.
Sin embargo habla de Chichimilá específicamente porque, “hay que abrir los ojos de lo que está pasando en esa comunidad”.
Se ha detectado la apertura de cuando menos 10 restaurantes que ofrecen diversos tipos de alimentos, similares a los que se pueden encontrar en cualquier parte de Quintana Roo, pero a precios mucho más bajos.
Comentó que los que se fueron algún día a trabajar, ahorraron su dinero y ante la inseguridad que se vive en el vecino estado, ahora están de regreso y creando sus propios restaurantes, en sus mismas casas y de esa manera generan empleos y desarrollo económico en su lugar de origen, donde hay más seguridad.
Los nuevos negocios se promocionan de tal manera que familias de Valladolid viajan por las noches al vecino municipio para consumir, ya que se pueden encontrar todo tipo de gastronomía, tanto yucateca como nacional, incluso comida internacional.
Los nuevos pequeños empresarios, son gente que trabajó en hoteles y restaurantes de Quintana Roo, lo aprendieron, ahorraron y vinieron a poner sus propios negocios, además que buscan la seguridad, que en Quintana Roo no tienen, subrayó.— Juan Antonio Osorio Osorno