VALLADOLID.— En protesta porque el Ayuntamiento entregó dos locales comerciales a funcionarios públicos, artesanos del parador turístico del cenote Zací cerraron con candados los espacios “hasta que se los entreguen a verdaderos artesanos”.
Los inconformes expusieron una relatoría de la situación que han vivido en los últimos años y recordaron que cuando se destruyó el exparador para construir nuevos locales varios vendedores fueron excluidos del listado con el argumento de que no son artesanos.
Entre ellos están Daniel Castillo Balam, María de los Ángeles, Ivonne Vivas Gómez y Javier Silva Duarte, quienes afirmaron que les quitaron sus locales luego de construirse el nuevo parador turístico.
Cuando se construyó el nuevo parador sobraron tres locales comerciales, indicaron los protestantes.
Funcionaria municipal abre una tienda en Zací
Sin embargo, les llamó la atención que a unos días de concluir la presente administración ya se entregaron dos, uno de ellos a Aida Flores Rosales, directora de Espacios Públicos y Mercado, quien lo puso a nombre de su madre, aseguraron los artesanos.
En este local se abrió una tienda de frituras y refrescos, lo cual viola la norma porque deben venderse exclusivamente artesanías, precisaron los quejosos.
La encargada se negó a dar su nombre ni identificar a su patrona, con el argumento de que no tiene por qué dar información.
Otro funcionario con local en Zací
El segundo local, según los inconformes, se le otorgó a Giovany Robles Gómez, encargado del departamento de artesanías en el Palacio Municipal y quien cuenta con un taller de tabartería, pero nunca había tenido un local en el cenote Zací.
En cuanto a la manifestación, primero se firmó un papel en blanco para luego entregarle un oficio al alcalde entrante, Homero Novelo Burgos, a fin de que se lleve al cabo una investigación por abuso de poder y autoridad del actual Ayuntamiento.
Los inconformes consideran que pasaron sobre los derechos de los artesanos, pues los tres locales se les debieron de entregar a los verdaderos artesanos y no a funcionarios público.

Incluso en los locales colocaron una pancarta que dice “fuera los funcionarios públicos”.
Posteriormente, cerraron con una cadena y un candado el puesto que está a nombre supuestamente de la directora de Mercados y Espacios Públicos.
Los inconformes advirtieron que no retirarán el candado sino hasta que se resuelva el problema.




