PROGRESO.— Como si fuese un domingo de temporada de verano, pero en enero, así se vivió ayer el tercer domingo del año con una buena afluencia turística, pues a las 4 de la tarde se encontraban ocupadas las poco más de 200 sombrillas y similar número de palapas en el malecón tradicional.

Los meseros, vendedores ambulantes de dulces, mangos, papalotes e inflables, estimaron que había alrededor de 5,000 visitantes.

Consideraron que 2,000 arribaron por la mañana y se marcharon después del mediodía, y las personas que estaban en la tarde, comenzaron a llegar a la una y se retirarían hasta la noche.

“Parece un domingo de temporada, pero en enero. Pensamos que no llegarían muchos paseantes, pues hay amenaza del norte.

“Incluso los puertos ya fueron cerrados a la navegación, aunque hay buen tiempo. El mar está un poco medio picado, lo que no impide que los visitantes se metan a bañarse”, expresó el mesero Eduardo Puc.

La jornada dominical, que transcurrió con calma, se inició a las 7 de la mañana cuando arribaron visitantes, antes que los restaurantes abrieran sus puertas. Muchos hicieron una escala en el mercado municipal, en donde desayunaron panuchos, tacos y tortas de cochinita.

Una vez que comenzaron a trabajar, los restaurantes recibieron clientela constante para ofrecer los desayunos y almuerzos.

Al mediodía, en las calles aledañas al malecón tradicional ya no había espacios de estacionamiento.

Los “viene-viene” hicieron su agosto, debido a que controlan y administran los lugares, quienes cobraban desde $20 por hora hasta $100 por día, tarifas que pedían en especial a vehículos con placas de otros estados, cuyos conductores pagaban con tal de estacionarse cerca de la playa.

Además de la ocupación de las palapas y sombrillas a la orilla del mar, numerosos paseantes pasaron el día a lo largo del malecón, desde un costado del viaducto de arcos del exmuelle fiscal, hasta las letras turísticas del puerto.

Algunos instalaron sus sombrillas, se sentaron en la arena y se metieron al mar.

Asimismo, consumieron refrescos, cervezas y botanas que compraron en los negocios de la zona.

Las ventas de marquesitas, cocos helados, micheladas, tacos, papalotes, dulces caseros, inflables, cebiches, pescado frito y bebidas alcohólicas, estuvieron a la orden del día.— Megamedia

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