PROGRESO.- El jueves por la tarde, alrededor de las 7:30, personal del Instituto Tecnológico Superior de Progreso que desde hace más de una semana se encontraba bajo protesta manteniendo las instalaciones a puerta cerrada, levantaron el bloqueo para que puedan reiniciar labores, incluso desde este viernes.
El motivo de lo anterior, es que como informó el gobierno del Estado, se logró entablar un acuerdo con los líderes sindicales, por lo que de manera general, luego de varias semanas de protestas, las protestas habrían llegado a su fin.
Dado lo anterior, los trabajadores del Tec de Progreso entraron en contacto con la directora de la institución Sugely Manzano Alvarado, a quien le dieron un recorrido por las instalaciones del plantel.
Esto con el fin de corroborar que no haga falta nada y de esta manera poder hacer una entrega de manera simbólica.
Luego de más de una semana de protesta, el personal del Tec de Progreso levantó el bloqueo y desmanteló los campamentos instalados en los accesos Luego de más de una semana de protesta, el personal del Tec de Progreso levantó el bloqueo y desmanteló los campamentos instalados en los accesos Luego de más de una semana de protesta, el personal del Tec de Progreso levantó el bloqueo y desmanteló los campamentos instalados en los accesos
Ya habían concluido las clases
Cabe mencionar que de acuerdo a lo indicado por los manifestantes en días anteriores, en este plantel concluyeron con las clases desde hace un par de semanas.
Por lo que no habría afectaciones con motivo de la protesta en cuanto a trabajos de aula; sin embargo, sólo haría falta avanzar con el trabajo de oficina.
TE PUEDE INTERESAR: Continúan tomadas las instalaciones del Instituto Tecnológico Superior de Motul
Tras la entrega de la escuela a la autoridad académica, los trabajadores procedieron a levantar los campamentos que habían colocado en los accesos de dicho lugar, donde permanecieron por más de una semana.
Manifestantes tenían un rol de guardias
Los trabajadores pasaban largas jornadas plantados en dicho lugar con el fin de evitar el ingreso a cualquier persona a las instalaciones del mismo.
Por esta razón tuvieron que desarrollar turnos para poder llevar a cabo las guardias durante las 24 horas del día.
A esto, se sumaron alumnos del plantel, quienes los apoyaban moralmente e incluso llevándoles comida y bebida para que sus profesores estuvieran a gusto mientras peleaban por sus derechos.