PROGRESO.— Desde el martes llegaron a Progreso volquetes cargados con arena que se depositó en el malecón tradicional de Progreso, específicamente a la altura de la calle 66, donde se encuentra la playa incluyente.
Ayer por la mañana personal del Ayuntamiento, con apoyo de maquinaria, comenzó con la tarea de esparcir la arena en los alrededores de la playa incluyente con el fin de salvaguardar el sitio, de acuerdo con el alcalde de Progreso, Erik Rihani González, quien supervisó las maniobras.
Erosión en Progreso
Como se ha informado, la erosión de la zona del malecón ha avanzado poniendo en riesgo la infraestructura y a las personas que suelen visitarla, por lo que con motivo de las labores de mantenimiento se ha cerrado el paso al público de manera temporal.
El alcalde de Progreso dio a conocer que esta acción se logra gracias a un trabajo coordinado con el gobierno del Estado e instancias federales, estos últimos con el tema de los permisos y los primeros con el apoyo para conseguir la arena.
El concejal aseguró que la arena que se está utilizando en estas labores proviene del dragado que se está llevando al cabo en Sisal para hacer más profundo el acceso al puerto de abrigo, como lo solicitaron pescadores.
En total, en esta etapa se utilizarán unos 1,500 metros cúbicos de arena, que fue avalada por la Semarnat para garantizar la compatibilidad con el ecosistema progreseño y así evitar impactos negativos.
Erosión en playas de Yucatán
La erosión parece imparable en la costa yucateca, en perjuicio de varios municipios.
Comunidades como Progreso, Chicxulub y Telchac han perdido entre 20 y 100 metros de playa en zonas críticas, donde antes había arena ahora solo quedan rocas o escombros, afectando vivienda, turismo y pesca.
El desgaste de playas reduce zonas de desove de la tortuga marina. En Progreso, los quelonios solo excavan 10 centímetros o menos antes de rendirse, ya que la arena está compacta, arenosa o cubierta de escombros, lo que impide el proceso reproductivo
Proyectos recientes con geotubos de CICY ‑y Conacyt lograron recuperar entre 5 y 8 metros de playa en un año, pero su eficacia varía de acuerdo con la dinámica del litoral y falta aún cobertura oriente‑poniente.