PROGRESO.- La noche del lunes se llevó a cabo con éxito la séptima edición de El Caminar del Ánima Sola, evento que se ha convertido en una de las actividades más esperadas en Progreso, tanto por los habitantes como visitantes.
En esta ocasión se vivió la segunda vez en que las ánimas solas caminaron desde el Parque Independencia hasta el cementerio municipal, donde se realizó la segunda edición del concurso de decoración de nichos.
Crece participación en caminata
Este año se duplicó la cantidad de participantes con respecto al año pasado con un total de 4 familias que decoraron las tumbas de sus seres queridos, aunque en un principio iban a ser 6 los participantes pero dos de ellos no participaron por temas de salud.
En cuanto al evento en general, la organizadora Lucrecia Lombardo agradeció la participación de todos los que la apoyaron para llevar a cabo esta actividad que ha ido creciendo año con año.
Cabe señalar que este año es en el que se ha presentado la mayor participación de personas que siguieron el recorrido caracterizados como ánimas y otros que se unen para acompañarlos.
En su caso, cada año elabora penachos muy creativos para poder representar diferentes situaciones.
Grupo de pixanes en el cementerio
Este año el que preparó para sí misma, representa un grupo de pixanes en el cementerio, simbolizando que precisamente el campo santo es el último sitio de reposo para los seres humanos.
Mismos que al morir no se llevan nada y en muchos casos, se quedan en soledad pues nunca nadie les lleva flores ni veladoras ni son recordados.
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Asimismo, preparó otro penacho, portado por una de las jóvenes que la acompañó en el recorrido, el que representaba a las ánimas de los panaderos que ya han fallecido. En vida dieron todo de sí por su trabajo, tanto para sostener a sus familias como para dar sustento a las familias del puerto.
A su llegada al cementerio dio un mensaje de agradecimiento a los presentes recordando que cuando inició prácticamente era ella sola.
Inicio complicado de la caminata
Incluso hubo quien se burlaba de ella, pero a pesar de todo ha continuado avanzando y no ha perdido el ánimo para realizar su caminata, que año con año ha ido creciendo hasta ser lo que se vivió la noche del lunes, un evento por demás emotivo.
“Seguiré haciéndolo hasta que pueda” señaló la progreseña, quien además es reconocida por su inmenso amor a los perritos.
Señalan que los apoya siempre que puede y todas las noches lleva a cabo un recorrido en su motocicleta para repartir croquetas a los perritos callejeros.











