MÉRIDA.- El jueves 14 de marzo los reyes de Suecia, Carlos XVI Gustavo Adolfo y Silvia, visitan Yucatán por segunda ocasión desde que son monarcas. Su primera vez en la entidad ocurrió en 1982, en el que fue su primer viaje de Estado a México.
En ese tiempo la reina consorte estaba embarazada de su tercera hija, la hoy princesa Magdalena. El matrimonio tenía cinco años de casados y ya eran padres de los príncipes Victoria y Carlos Felipe, quienes tenían 4 y 2 años de edad, respectivamente. Ella tenía 38 años de edad y él, 35. En México el presidente era José López Portillo.
En aquella ocasión, su gira por territorio mexicano fue del 18 al 24 de enero. Los monarcas llegaron al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de Mérida el día 23, procedentes de Jalisco, para luego dirigirse a la zona arqueológica de Chichén Itzá.
Reyes de Suecia en Chichén Itzá
Los reyes arribaron a las 12:55 horas, a bordo del avión Quetzalcóatl II de la Fuerza Aérea Mexicana. La bienvenida fue sencilla, “sin orquestas ni bandas militares, con excepción de unos 300 scouts que formaron una valla”. Los recibieron el gobernador Francisco Luna Kan y el alcalde Guido Espadas Cantón, acompañados de sus esposas; el oficial mayor de Gobierno, Carlos Carrillo Vega y la Señorita Yucatán, Fabiola Torre Sarlat.
El Diario relata que la comitiva fue trasladada en autobuses y en el trayecto, “el patrullero scout Luis Felipe Bousa, del Grupo Uno, regaló al Rey una pañoleta scout”.
Los visitantes fueron llevados al hotel Mayaland en Chichén Itzá, donde el gobierno del Estado ofreció una comida y los monarcas escucharon canciones yucatecas que interpretó la Orquesta Típica Yucalpetén. Poco después asistieron a un festival, en el que participaron elementos del Ballet Folklórico del Estado y la Orquesta Jaranera.
“Una de las jóvenes, Luisa Rodríguez Berzunza, se acercó a la reina Silvia y le entregó un lazo rojo. ‘Bonito regalo, me lo pongo’, dijo la Reina y se lo colocó en el cabello”, consigna la nota publicada el 24 de enero de 1982.
En la comida Gustavo Adolfo pronunció un breve discurso en el que, entre otras cosas, dijo que “resulta lógico que nuestra visita a México concluya en Yucatán, entre los vestigios de una de las más vastas culturas precolombinas de México”.
Reyes, impresionados con Yucatán
“La cultura vieja de Yucatán —continuó— siempre ha interesado mucho a los suecos. Quiero nombrar al hermano de mi abuelo, el Príncipe Bíller, que vino a la cabeza de una expedición científica en esta zona en los años 20. Lo que encontró está ahora en el museo etnográfico de Estocolmo”, dijo. “Yucatán nos ha causado realmente una profunda impresión”, agregó.
En la zona arqueológica, visitaron primero Chichén Viejo, ese que recientemente se abrió al público. A las 4:35 de la tarde comenzó su recorrido. “Carlos Gustavo Adolfo, interesado en esos vestigios mayas y estudioso de la cultura de sus pobladores, decidió subir los escalones y observar de cerca los monumentos”, detalla la nota del Diario. Se agrega que Silvia, debido a su embarazo “y por consejo médico” se abstuvo de acompañar a su esposo en algunos sitios.
Reina de Suecia en Yucatán, “encantadora”
La crónica destaca la amabilidad de la soberana y la describe como “encantadora y sencilla”. “Siempre sonriente, con el sombrero que le obsequiaron para protegerse del sol, saludaba a quienes se acercaban y platicaba con ellos en español”. La reina habla seis idiomas: sueco, alemán, portugués, inglés, francés y castellano, habiéndose especializado en este último.
En aquella época se permitía subir al castillo de Kukulcán, cosa que el rey hizo. Luego de recorrer la zona, los visitantes fueron llevados a Uxmal, donde presenciaron el espectáculo de Luz y Sonido, para después pernoctar en el hotel del lugar.
Rey de Suecia en Uxmal
Al día siguiente, el rey salió a las cinco de la mañana de su suite y subió al Castillo del Adivino para presenciar un amanecer yucateco durante dos horas, pues quería sentir la misma experiencia que sintieron los mayas—declaró al Diario el entonces embajador mexicano en el país nórdico, Lic. Alfonso Castro-Valle.
Luego la pareja viajó al aeropuerto de Mérida, a donde llegaron a las 11:29 horas, a bordo del autobús “El Chaco”. A las 12 del mediodía partieron rumbo a Cancún, para gozar de unas vacaciones “estrictamente privadas” durante una semana.
Segunda visita de los reyes de Suecia a Yucatán
Cuarenta y cuatro años después, los monarcas suecos regresarán a Uxmal, zona arqueológica que en esta ocasión recorrerán de día y en pareja.
También, saludarán a niños representantes de las etnias maya y yaqui. (En Chichén Itzá, en 1982, ella saludó a varias pequeñas). Está prevista su llegada alrededor de las 3 de la tarde a Uxmal, donde presenciarán la jarana yucateca, que ejecutarán dos parejas de niñas y niños de Kinil, Tekax. Esto será a los pies de la Pirámide del Adivino, la misma a la que el rey subió en 1982 para ver el amanecer yucateco.
Hoy, el monarca tiene 77 años de edad y su esposa, 80. Tienen 47 años de casados, tres hijos y ocho nietos. En México, el presidente es Andrés Manuel López Obrador, quien los recibió en Palacio Nacional el pasado día 12.
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