Las investigaciones sobre la muerte del joven José Eduardo Ravelo, detenido por policías municipales y supuestamente golpeado y agredido sexualmente, se iniciaron con enredos, confusiones y dimes y diretes. Sin embargo, cerca del capítulo final, la Procuraduría General de la República da una versión de su muerte que sorprende a muchos.
La sociedad yucateca se consternó ante este hecho cruento y siguió de cerca las investigaciones, empero ante los enredos las autoridades federales tomaron el caso, ante el llamado del presidente de otorgar justicia y cero impunidad. Recientemente, la FGR excluyó a la Fiscalía del estado y dio una información en donde señala que el joven falleció a causa de “una neumonía mal atendida”.
Y los yucatecos quedamos atónitos. Surge una revelación sorprendente, en donde se señala que no hubo tortura, ni agresión sexual y esa neumonía no fue producto de los golpes y maltratos propinados. Según la FGR esa conclusión se da después de exhumar el cadáver.
Es decir, ¿todo fue invento del joven veracruzano? Y los moretones, los golpes recibidos y el estar tirado un tiempo en el suelo, el que le pongan la rodilla en el cuello y el salir con prendas diferentes o con poca ropa en los vídeos fueron simples alucinaciones.
Si no fueron los policías municipales, ¿quiénes fueron los agresores?
El joven señaló a uniformados de la corporación estatal como sus agresores e incluso aportó algunos nombres. ¿Se investigó a uniformados estatales?
Es lamentable que a tres meses de la detención, de la muerte del joven y de arduas investigaciones, ahora se diga que una neumonía produjo el fallecimiento.
¿Si en verdad fue la neumonía mortal la causante del desenlace trágico por qué tanta maroma y teatro entre las autoridades de la entidad? ¿Por qué no se dijo desde el principio? ¿Por qué tantos enredos y declaraciones confusas que mostraban que se buscaba proteger a alguien o a algunos? ¿Por qué el ofrecimiento económico a la madre para silenciarla?
¿Fue acaso un circo montado lo de los cuatro policías municipales? ¿Acaso con estos chivos expiatorios se buscaba proteger a otros uniformados?
Algo importante que se debe aclarar en el dictamen final es si los policías estatales detuvieron después a José Eduardo, al salir de la cárcel municipal. Esto también demostraría si el joven inventó lo de los nombres de esos uniformados o fue real la detención.

Acusación

Ahora, varios funcionarios de la Fiscalía estatal son acusados de falsear información y de forzar a testigos para declarar en contra de los policías municipales. Hubo muchos enredos, confusiones y ocultamientos desde el inicio del caso, y con esta neumonía mortal se confunde más.
El presidente dijo que habría justicia y aquí en el estado señaló que no habría impunidad en el caso Ravelo, pero las declaraciones recientes de la FGR nos ponen a pensar si en realidad se investigó a fondo o se quiere proteger a algunos.
Solo falta decir que el joven se golpeó varias veces al caer, que él se lastimó y se flageló y luego la lluvia que le cayó en el camino a casa le produjo la fatal neumonía, amén de la tardanza médica. Ahora, esa tardía atención médica que recibió José Eduardo se está investigando para el deslinde de responsabilidades.
¿Por qué hasta ahora se descubre la neumonía? Además, ¿por qué la FGR filtra esta información cuando no hay conclusiones finales, ni un informe completo oficial? Están preparando a la sociedad yucateca para recibir un resultado final en donde no hay culpables, ni los derechos del joven se violentaron.
La muerte de José Eduardo, después de ser detenido por policías, no es la única ocurrida en la entidad. Hay varios detenidos que han fallecido dentro de la patrulla o en la celda después de recibir golpes y agresiones. Las partes médicas registran estas muertes a causa de la tortura recibida. Lo sorprendente es que no hay culpables y se apuesta por el olvido.
Ni a la madre del joven fallecido se le notificó sobre esa conclusión de la FGR, solo recibió una notificación para que se presente ante las autoridades federales, quizá para convencerla de que su hijo falleció de la neumonía y no de las agresiones policiacas.

Investigaciones

Las investigaciones por la muerte de José Eduardo comenzaron por los golpes, agresiones y vejaciones recibidas, al final del camino se señala una enfermedad mal atendida la causante del fatal desenlace.
Pero si la policía municipal no golpeó, ni torturó al joven, ¿quiénes lo hicieron? ¿Quiénes son los culpables? ¿Qué tipo de uniformados él denunció como sus agresores?
Lamentablemente, la justicia se ve endeble, con un sistema inmunológico precario, es una justicia con neumonía.— Mérida, Yucatán.
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Profesor