Después de un proceso de investigación, el Consejo de Notarios de Yucatán determinó que el fedatario involucrado en la acusación de compraventa irregular de un lote en Cholul sí cumplió los pasos que establece la Ley del Notariado, según informó el presidente de ese organismo, Héctor Victoria Maldonado.
Por lo tanto, manifestó, para el Consejo de Notarios se trata de un caso resuelto en lo que compete a la parte administrativa.
Sin embargo, subrayó que quedan a salvo los derechos del denunciante de recurrir a una autoridad judicial para promover por esa vía la nulidad del acto impugnado.
El presidente del Consejo fue entrevistado sobre la acusación de despojo de un terreno en Cholul que interpuso un ingeniero de la tercera edad.
Despojo de un lote a un adulto mayor
Como ya publicamos, la identidad del denunciante fue suplantada por un homónimo avecindado en Campeche, según el documento que presentó en la Notaría 7, que formalizó la operación.
El doctor Victoria Maldonado señaló que, en efecto, en enero pasado el Consejo de Notarios recibió una queja suscrita por Raúl Ortiz Ruiz, en la que narra detalles que el Diario ya dio a conocer.
Como establece el procedimiento, se admitió la queja y se dio vista al notario Jorge Hidalgo Aguilar y Aguilar, ante quien se celebró el acto reclamado, para que en un plazo de diez días formulara una contestación.
A partir de la respuesta, la Comisión de Honor y Justicia —que tiene cuatro integrantes— disponía de un mes de plazo para hacer las averiguaciones pertinentes y emitir un dictamen.
El notario cumplió con la ley y diligencias
Al término de ese procedimiento, explicó el directivo, se consideró que el notario cumplió adecuadamente con la diligencia que establece la Ley del Notariado del Estado de Yucatán.
“En su informe, el notario dice: yo celebré un acto con un señor que se llama Raúl Ortiz Ruiz. Esta persona se identificó con una credencial de elector”, agregó.
Indicó que los notarios cuentan ahora con un instrumento que certifica la validez de la credencial en la plataforma de datos del Instituto Nacional Electoral (INE). En su informe, el abogado Aguilar anexó la constancia de validación.
El notario número 7 también exhibió copia del acta de nacimiento que presentó el interesado. Es de una persona llamada Raúl Ortiz Ruiz, de Campeche, nacida el 22 de diciembre de 1937.
“Aquí hay un tema”, abunda el entrevistado. “En su escrito, el quejoso afirma que tiene 74 años, pero cuando adquiere la propiedad en 1978 dice que tiene 41. Si sumamos esos 41 años a los transcurridos hasta ahora, que son 43, entonces llegamos a 84. Y esta persona (la que celebró la compraventa) tiene 84”,
“Con todos esos elementos, la conclusión fue que el notario cumplió todas las obligaciones estipuladas en la Ley del Notariado”.
No obstante, recalcó que la persona que se siente afectada puede acudir a la autoridad judicial para demandar la nulidad del acto. Entonces será un juez el que tome la decisión.
“El procedimiento del que hemos hablado no puede sustituir a la autoridad judicial”, precisó. “Son dos cosas diferentes: la parte adminitrativa es revisar la actuación del fedatario desde el punto de vista de la Ley del Notariado, y por el otro lado está el fondo del instrumento, que no le corresponde al Consejo sino a un juez”.
“Si el notario cumplió, pero el acto tiene algún vicio de nulidad, eso no lo puede declarar el Consejo sino que le compete a un juez”.
Personas distintas
La credencial del INE del denunciante indica que éste nació en 1947, no en 1937, lo cual significa que sí tiene 74 años. La escritura original del predio tiene un error, porque dice que en 1978 aquél tenía 41 años, pero después indica que nació en 1947. Por lo tanto, sí tenía 31. Las credenciales muestran a dos personas distintas.
En la escritura de compraventa el falso vendedor aparece como “ganadero”, con residencia en Campeche. En el acta de nacimiento que entregó en la Notaría se indica que es hijo de María Luisa Ruiz Pérez y Raúl José Ortiz Gómez, quienes nada tienen que ver con la víctima de los hechos.
El reportero preguntó al presidente del Consejo de Notarios si este caso no exhibe que todos son vulnerables, jurídicamente hablando, ante los homónimos.
El dirigente respondió:
“Hay muchas cuestiones que las homonimias pueden ocasionar. Las personas tendrían el derecho, si consideran que fue suplantada su identidad, de acudir ante un juez”.
