El aire descendente seco en el Océano Atlántico evitó que los huracanes llegaran a la Península de Yucatán en la temporada 2023, manifestó Lixion Ávila, experto del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
En la primera ponencia del XIX Seminario Internacional de Huracanes en esta ciudad, el doctor Lixion Ávila explicó que en el Atlántico surgieron 20 potenciales huracanes, principalmente en las costas de África, pero todos los fenómenos atmosféricos tuvieron una trayectoria hacia mar abierto por las bajas presiones en la Cuenca del Atlántico y cuando entraron a aguas frías se desintegraron.
“Yucatán estuvo bastante a salvo de los huracanes porque el aire descendiente no permite que se formen estos fenómenos naturales por el aire seco”, señaló el experto. “El huracán necesita aire húmedo y no lo tuvo en agosto, septiembre y octubre de 2023 en esta parte de México”.
Todo lo contrario ocurrió en el Océano Pacífico donde de 17 huracanes pronosticados en 2023, 8 se formaron y fueron intensos, uno de los cuales fue “Otis” que devastó Acapulco y otras zonas del estado de Guerrero. Incluso, el huracán “Otis” agarró una intensidad rápida que generó errores en los modelos meteorológicos del Centro Nacional de Huracanes, donde están los mejores expertos en la materia y los mejores equipos tecnológicos.
Reconocimiento a los cazahuracanes
El doctor Lixion Ávila hizo un reconocimiento a los pilotos y tripulantes de los aviones cazahuracanes y de la NOAA de Estados Unidos porque arriesgan sus vidas de volar en la intensidad de los huracanes, todo por salvar muchas vidas en riesgo si no hubiera un pronóstico con datos reales del fenómeno.
En la temporada 2023 los cazahuracanes y los aviones del NOAA, la agencia meteorológica estadounidense, realizaron 40 misiones dentro del área de influencia de los huracanes porque había una amenaza para la tierra.
Para este año las condiciones climatológicas son similares a la temporada anterior en el Atlántico, pero como es costumbre del doctor Lixion Ávila, declinó hacer pronósticos sobre cuántos se formarían y tendrían categoría de huracán.
En el marco de este Seminario Internacional de Huracanes, que comenzó ayer en el hotel Fiesta Americana, los participantes en la ceremonia inaugural destacaron la importancia de la capacitación continua porque las medidas preventivas salvan vidas. Además, dijeron que los aeropuertos son relevantes porque son el motor de la economía y la vía para la llagada rápida de ayuda humanitaria a los lugares impactados por los ciclones.
Se alistan para los ciclones
Hoy concluye en el hotel Fiesta Americana el XIX Seminario Internacional de Huracanes.
Ayer en el marco de la jornada inaugural, Héctor Navarrete Muñoz, organizador y director regional de Grupo Asur, hizo un recuento de cómo surgió la necesidad de organizar un seminario en 2005 por estragos que ocasionó el huracán “Wilma” en Quintana Roo.
“Con estos fenómenos hay que estar en sintonía, saber qué hacer antes, durante y después, ese es el objetivo esencial de este seminario”, destacó en su intervención.
“Es la primera campanada de la temporada, hay que empezar a trabajar antes de que inicie la temporada de huracanes. Lo que hace este seminario es recordar lo que tenemos que hacer los que tenemos la responsabilidad de administrar los aeropuertos”, apuntó.
Además, dijo que este seminario ha creado una gran red de colaboración desde el Caribe, Centroamérica, México y el este de Estados Unidos. Es el evento más concurrido porque se inscribieron 700 personas, lo siguieron por internet en muchos países del mundo y porque las autoridades gubernamentales saben que los aeropuertos dan un servicio especial a la ciudad y al estado.
Navarrete Muñoz anticipó que el 15 de mayo próximo pondrá en servicio en el aeropuerto de Mérida el nuevo Sistema Meteorológico Aeroportuario, que contribuirá al seguimiento profesional de los huracanes que se formen en el país.
El director de Unitar y Cifal, organismos de la ONU, Alex Mejía, dirigió un mensaje virtual desde Suiza en el que destacó que es importante saber cómo manejar estos desastres naturales con una visión holística y conocer por medio de la ciencia la zona de impacto de un huracán. Y por ello es valioso que expertos impartan estos seminarios de capacitación, porque salvan vidas.
Confianza en los meteorólogos
También el director de Protección Civil del Estado, Enrique Alcocer Basto, reconoció que esta dependencia no es especialista en huracanes, como sí lo son los meteorólogos profesionales y científicos, pero conocen los riesgos y el gobierno estatal hace la parte que le corresponde, tiene una red de refugios temporales y protocolos de auxilio a la población, realizan el monitoreo de los fenómenos atmosféricos en su Centro Integral de Gestión de Riesgos de Desastres y lanzan avisos sobre los fenómenos naturales.
En las ponencias, los doctores Lixion Ávila y Omar García, especialistas meteorólogos, reconocieron los errores en los pronósticos en el huracán “Otis” que devastó Acapulco el año pasado.
“Desafortunadamente hubo errores de trayectoria y de intensidad en 2023. No estuvimos tan bien en comparación con los últimos cinco años de pronósticos”, admitió el doctor Ávila.
“En el Centro Nacional de Huracanes de cotejan todos los pronósticos, matemáticamente se calcula dónde va y dónde impacta y tuvimos un 25% de errores, afortunadamente la mayoría de los errores fueron por la tormenta ‘Philippe’. Hubo pronósticos casi perfectos como en el huracán ‘Hilary’, tanto en trayectoria como intensidad”.
Lixion Ávila también reconoció que el modelo europeo de meteorología fue el mejor en los pronósticos sobre huracanes en el Océano Atlántico en 2023 y en el Pacífico también el europeo estuvo más asertivo en pronósticos cortos.
Pero a largo plazo, el mejor sigue siendo el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
Cuando habló del huracán “Otis”, el experto del CNH dijo que los pronósticos sobre la trayectoria no estuvieron tan mal, pero en cuanto a su desarrollo sí porque el CNH calculó su fuerza en 80 nudos y en cuestión de horas alcanzó 165 nudos, algo extraordinario que nadie con la mejor tecnología pudo haber pronosticado.
Lo que sí hicieron algunas universidades o meteorólogos ávidos de fama es que después ajustaron sus pronósticos para difundir que ellos sí atinaron o lo pudieron advertir en sus modelos, pero la realidad es que la evolución de “Otis” sorprendió a todos los científicos atmosféricos y meteorológicos.
“Ni los más confiables equipos y científicos lograron pronosticar la intensidad de ‘Otis’. No se pudo hacer bien el trabajo”, admitió.
2023, un gran aprendizaje sobre huracanes
El doctor Omar García, investigador del Instituto de Astronomía y Meteorología de la Universidad de Guadalajara, dijo que la temporada 2023 de huracanes dejó un gran aprendizaje que puede ayudar a mejorar el trabajo de todos los involucrados en el tema de huracanes.
Puso una gráfica de los dos últimos poderosos ciclones: “Patricia”, que alcanzó 345 kilómetros por horas y es el más intenso de la historia en México, y de “Otis”, con 269. Y preguntó a la asistencia: ¿cómo será la temporada 2024?
Hubo una variedad de respuestas, hasta la más catastrófica, pero alertó que eso sería generar sensacionalismo o una mentira emotiva que tendría un fuerte impacto social en la población.
En ese sentido, precisó que no se puede creer lo que se difunde en las redes sociales porque no tienen una base matemática ni mucho menos de física ni un análisis de expertos meteorólogos. Todo depende de las condiciones climatológicas, por ejemplo, para que tenga una mayor intensidad requiere que el agua del Océano esté caliente, pero no influye en su trayectoria, que depende de otros factores.
Se refirió a la advertencia del huracán “Aletta” que pegaría en 11 estados mexicanos del Pacífico y norte del país y aún está muy lejano. Estos nuevos cambios también alertan a los expertos del CNH que ahora analiza emitir pronósticos de seis a siete días sobre los huracanes, ampliando el plazo para determinar los riesgos del fenómeno con anticipación.
Antes el pronóstico se emitía a los cinco días y luego pasó a tres, que es el que predomina en la métrica meteorológica mundial. Este nuevo pronóstico de seis a siete días todavía tiene muchos errores de cálculo, pero está en proceso de perfeccionamiento en forma interna en el CNH.
El doctor Teo Babun, presidente y director ejecutivo de la organización Alcance, experto en logística de ayuda humanitaria, afirmó que hay un serio problema para la distribución de toda la ayuda alimentaria que reciben los países afectados por los ciclones porque no hay la suficiente logística y voluntarios para armar los paquetes y distribuirlos a los afectados.
En cada impacto, el mundo se vuelca en apoyo a los países afectados, los políticos aprovechan este desastre para recaudar ayuda sin la asesoría de organismos especializados, por lo que llenan hasta sedes de bomberos y policías que no buscan qué hacer con tanta ayuda.
Las aduanas complican la ayuda con sus trámites y las navieras también se niegan a trasladar los contenedores porque saben que no llegarán a sus destinatarios por falta de una logística y voluntarios que hagan ese trabajo.
Lo más terrible que ha observado es lo que pasa en Haití donde llegaron miles de contenedores de ayuda humanitaria, hasta contenedores de abrigos de invierno remitidos de Nueva York, pero el gobierno ante la imposibilidad de distribuirlos y la falta dinero, lo vende para pagar los salarios de los servidores públicos.
En la inauguración estuvieron presentes el alcalde de Mérida, Alejandro Ruz Castro; la cónsul de Estados Unidos en Mérida, Dorothy Ngutter; el administrador del aeropuerto de Mérida, Óscar Carrillo Maldonado, entre otros. Hoy fue el primer día del Seminario, mañana concluye.
