MÉRIDA.- El huracán “Berly” continúa con su trayectoria hacia la Península de Yucatán, lo que ha hecho que cientos de ciudadanos de Mérida realicen las llamadas “compras de pánico”.
Ante tiendas llenas en varios puntos de la ciudad, el sector empresarial hizo un llamado a no causar desabasto.
Tiendas repletas en preparación por “Beryl”
Ante la llegada del huracán “Beryl” a la Península de Yucatán, la población se ha volcado a las tiendas de conveniencia para prepararse en caso de emergencia.
Supermercados del norte de la ciudad estuvieron abarrotados. Al ingresar al estacionamiento se observaban todos los espacios ocupados y varios automovilistas daban vueltas en espera de un lugar.
El siguiente tema a vivir era la escasez de carritos para los víveres, situación que generó discusiones entre los compradores, pese a que hay personal advirtiendo la espera para tener uno.
Larissa Contreras, quien estaba encargada de proporcionar dichos carritos en uno de esos sitios de abasto, contó al Diario que ya no era posible que se hiciera con orden, las personas abordaban a quien iba saliendo y los acompañaban a sus autos para llevarse el carrito, pues no querían esperar el estimado de 10 a 15 minutos para conseguir uno.
Al ingresar a la tienda se veían las filas extensas, con carritos llenos de productos, y pese a que estaban abiertas todas las cajas, cada una tiene entre 20 y 30 clientes en espera, algunos con más de un carro, por lo que han hecho la recomendación de revisar que toda la mercancía tenga códigos de barra para evitar más demoras, además de tener paciencia para pasar de 45 minutos a una hora para pagar.
Entre los productos alimenticios con mayor demanda están aceite vegetal, pastas, enlatados, frijoles embolsados, sopas instantáneas, leche, galletas, agua purificada y huevo.
Otros productos no comestibles, pero muy recurridos, son lazos o piolas para atar, repelentes, velas y encendedores, cloro, bolsas para basura, alimento para mascotas y papel higiénico; así como extensiones eléctricas, cubetas, lámparas y pilas alcalinas.
En los anaqueles se puede ver la escasez de productos locales como galletas, salsas, fideos, galones de agua purificada y de las principales marcas de papel higiénico. El pasillo más abarrotado de la tienda era el de pastas y comida enlatada.
En la larga espera de la fila se pudo ver a algunos compradores mirando en sus celulares información acerca del desplazamiento del huracán, otros platicaban anécdotas de los huracanes devastadores, como “Gilberto” e “Isidoro”, o las tormentas recientes como “Cristóbal” y otros eventos ciclónicos conocidos.
Algunos se daban consejos a otros y algunas personas más se notaban nerviosas ante los mismos comentarios.
El personal de las cajas, comentó que esta situación ha imperado desde el domingo pasado, exacerbándose con el transcurso de las horas.
Noemí González dijo que no se daban abasto ni los cajeros ni el personal de la tercera edad conocidos como “cerillos”, quienes se apoyaban entre ellos para embolsar las compras.
Llaman a no causar desabasto por compras de pánico
“Se invita a la gente a no ser los que creemos esta alarma o desabasto (por la llegada del huracán), y compremos únicamente lo que necesitamos y un poquito más, para que todas las personas que quieran tener acceso a ciertos productos puedan hacerlo”, dijo Levy Abraham Macari, presidente de la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo de Mérida (Canaco Servytur).
Además, señaló que ya en algunas tiendas se pueden observar anaqueles vacíos, tal vez propiciado por personas que han comprado un poco de más de algunos productos, y lo que vienen platicando con las empresas de autoservicios.
“Si la gente compra de manera racional y sólo un poco más de lo que necesita o un poco más de lo habitual, a través de los centros de distribución se pudiera solventar ese aumento en las compras ante la llegada del huracán”, apuntó.
Ante la llegada del huracán “Beryl”, que se espera empiece a afectar a la entidad mañana jueves, se preguntó al líder de los comerciantes en Mérida si están preparados para atender las compras de pánico.
Abraham Macari comentó que sólo si la gente se desborda en compras de locura nadie podría atender esas situaciones de desabasto.
Asimismo, reveló que ya empiezan a tener reportes de un incremento moderado en las ventas de las tiendas de autoservicios, pero “sin picos alarmantes”.
Resurtido en tiendas de Mérida
El empresario reiteró que “si la gente empieza a hacer compras irracionales y llevarse todo lo que hay en el anaquel, pues no hay centro de distribución que aguante ese tipo de demanda”.
“Vamos a pensar en algún producto en específico, si lo necesitamos vamos a comprar para siete días, pero hoy vamos a comprar para 10 o más días y así no hay mayor problema, pero si llegamos a comprar para un mes, pues sí se crearía el desabasto”.
Si se mantienen de esta forma con compras de sólo un poco más de lo que se requiere, sin llegar a la exageración, continuó el empresario, esperamos que con los centros de distribución que tienen las cadenas no haya desabasto.
En lo referente al personal de sus negocios, el presidente de la Canacome dijo que siempre toman las medidas para estas situaciones y los protocolos que el gobierno del Estado dicta.
Además, comentó que de acuerdo con los reportes todo parece indicar que habrán lluvias y vientos fuertes en Mérida, pero en el interior del estado sí se espera un poco más de afectación, sobre todo en el Sur.
Aquí en la ciudad de Mérida, al parecer solo algo de afectación, y ya se van preparando para las eventualidades que se pudiesen presentar.
Con información de: Darinka Ruiz Morimoto y David Domínguez Massa
