CIUDAD DE MÉXICO.- El hackeo a Sedena reveló que el Ejército Mexicano mantiene en la mira a los grupos feministas más relevantes de la Ciudad de México, pero también a figuras públicas como la cantante chilena Mon Laferte y la candidata independiente a la presidencia en 2018 Marichuy.

De acuerdo con los documentos filtrados por el grupo de ciberactivistas “Guacamaya”, la Secretaría de la Defensa Nacional ha dado puntual seguimiento a los movimientos feministas en México desde 2017.

El documento más reciente sobre el presunto espionaje de la Sedena a feministas data del 8 de agosto de 2022 y lleva por título “Activismo Social Relevante”, donde detallan fechas y personalidades prominentes de los colectivos feministas e incluso la cantautora Mon Laferte.

Guacamaya Leaks revela espionaje a feministas en México

Según los documentos revelados en el llamado “Guacamaya Leaks”, hasta 2022 la Sedena mantiene vigilancia continua a 15 colectivos feministas que catalogó como grupos subversivos, anarquistas e incluso de guerrillas.

Entre estos colectivos se encuentran Histerias, Marea Negra, Colectiva Aquelarre Feminista, Coordinadora 8M, Colectivo Feminista de Economía del IPN, Resistencia Queer, Las Brujas del Mar, Bloque Negro y Cueva de Brujas, cuyas actividades son vigiladas por el Ejército mexicano.

El medio Latinus con acceso a los documentos filtrados, indicó que el pasado 8 de agosto la Zona Militar 1 en CDMX envió al Centro Coordinador de Fusión de Inteligencia Militar sobre los grupos sociales con presencia en la ciudad y que son señalados por presuntos actos vandálicos.

¿Qué revela el hackeo a Sedena sobre el feminismo en México?

El hackeo a Sedena reveló el presunto espionaje de las Fuerzas Armadas a los colectivos feministas así como el seguimiento a casos que podrían causar revueltas por parte de las defensoras de los derechos de las mujeres.

Uno de los casos que el Ejército señaló como relevantes fue la muerte de Lesvy Berlín Osorio en 2017 por haber generado una ola de manifestaciones feministas en lo que la Sedena catalogó como la “coyuntura perfecta”.

También aparece el caso del presunto abuso sexual a una menor de edad por parte de policías capitalinos en 2019.

Además, Sedena recopiló información sobre la creación del Colectivo Brujas Sufragistas en documentos fechados de diciembre 2020.

Asimismo, se encontraron informes detallados de las marchas feministas de 2019 y acciones “de gran relevancia” realizadas por dichos colectivos como la toma del edificio de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en la Ciudad de México.

En dicho caso, fueron identificadas 11 feministas del Bloque Negro involucradas, señaladas en el documento bajo diferentes alias así como fichas de la Fiscalía General de Justicia de CDMX de personas acusadas por supuestos actos delictivos en marchas feministas.

Esas fichas corresponden a seis mujeres y un hombre, que el Ejército aseguró servirán para obtener “objetivos prioritarios e iniciar carpetas de investigación”, poniendo especial atención a sus redes sociales como posibles medios de enlace, comunicación y movilización.

Además de los grupos feministas SEDENA tiene identificados a 18 grupos anarquistas con presencia en 14 estados del país, la mayoría como subordinados de Coordinadora Estudiantil Anarquista, que el Ejército catalogó con tendencia “violenta y radical”.