El jueves 2 de marzo el Congreso de Puebla aprobó la llamada ‘Ley Malena’ que tipifica como tentativa de feminicidio los ataques con ácido, químicos y corrosivos; sesión a la que asistió como invitada María Elena Ríos, una sobreviviente de este tipo de violencia; sin embargo, cuando ésta quiso tomar la palabara, un diputado la calló.
Un ataque con ácido busca dañar física y psicológicamente a través de una deformidad visible, lo que la orillaría al aislamiento, además del dolor que deja la cicatrización de esa lesiones.
La ‘Ley Malena’, que sanciona la violencia química, se denomina así también por caso de ataque con ácido a la saxofonista María Elena Ríos, originaria de Santo Domingo Tonalá, en la Mixteca de Oaxaca.
Puebla aprueba ‘Ley Malena’ contra ataques con ácido; callan a María Elena Ríos
Sin embargo, la activista María Elena Ríos quien padeció un ataque con ácido el 9 de septiembre de 2019, en Huajuapan de León, fue callada durante la sesión por el diputado por el PRI, presidente de la Mesa Directiva, Néstor Camarillo Medina, quien impidió que la saxofonista hiciera uso de la palabra.
María Elena Ríos había tomado la palabra para decir que las leyes no deben quedar en letra muerta, por lo que pedía que sí se aplique la ‘Ley Malena’ aprobada.
Justo en ese momento la activista fue abruptamente interrumpida por Néstor Camarillo Medina, con el argumento que los invitados no pueden hablar durante la sesión.
Posteriormente, María Elena Ríos acusó al diputado del PRI por revictimizarla e invisibilizar su lucha. Dijo que el piista actuó motivado por el “protagonismo y vanidad política”. Incluso exhibió en Twitter un intento posterior del diputado priista por disculparse, a través de una intermediaria, pues al parecer “reconoce que no reaccionó de manera correcta” durante la sesión donde la calló.
Al recinto legislativo también asistieron Esmeralda Millán, Carmen Sánchez y Leslie Moreno, víctimas de ataques con ácido.
¿Qué dice la ‘ley malena’ contra los ataques con ácido?
La ‘ley malena’ en Puebla se trata de una reforma al Código Penal local para considerar los ataques con sustancias corrosivas como tentativa de feminicidio, por lo que de probarse el delito, los victimarios podrían obtener una pena de hasta 40 años de cárcel y una multa de casi 70 mil pesos.
Con esta aprobación del Congreso de Puebla también se modifica la Ley para el Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, para que los ataques con ácido sean reconocidos como violencia ácida.
En Oaxaca, la ley que sanciona a los ataques considerados como violencia ácida y química, alcanza también una pena máxima de 40 años.
Hay que precisar que en el caso de María Elena Ríos, quien fue atacada con ácido, la legislación oaxaqueña no es aplicable, pues su proceso ya había ocurrido cuando la ley se aprobó.
