(Primera Columna publicada el 5 de diciembre de 2007)
Después de asistir la noche del domingo a un concierto en el parque de las Américas, Vittorio Zerbbera salió en vuelo fletado a la ciudad de México, en respuesta a un correo electrónico que le llegó de su alma máter, la Academia de la Mafia de la Universidad de Sicilia, con sede en Palermo.
El vuelo tuvo dos efectos. Uno: la cancelación, el lunes, del análisis cotidiano de la guerra de Chablekal en la banca de costumbre. Dos: una invitación al académico italiano para que se registre en la Sociedad de Ausentes en Cuerpo Presente, S. de. RL, fundada y nutrida por creciente grupo de ciudadanos inmobiliarios de esta plaza y ejidos circunvecinos.
En el campus que tiene la Academia en el DF, don Vittorio asistió a un cónclave continental convocado para evaluar dos sucesos que han estremecido el cuartel general de la cosa nostra y sus embajadas y consulados en México y las Américas del centro y el sur. Ambos acontecimientos fueron confirmados por las agencias noticiosas AP y Ansa (italiana).
Los carabineros pescaron en la ciudad de Catania a Vincenzo Santapaola, capo supremo de la división oriental de Sicilia, hijo de don Benedetto, el llorado “top boss” y fundador del sindicato del crimen que opera en el Mediterráneo.
Mientras tanto, en Villarosa (tierra firme italiana), la policía liquidaba de un tiro en la nuca, mientra saltaba por la ventana, a Daniele Emmanuello, pez gordo que milita con cinco estrellas en la lista de los 10 bandidos más buscados de Italia desde que se hizo ojo de hormiga hace 11 años.
Los merecimientos de Santapaola y Emmanuello incluyen: desaparición en grado de levantamiento, cajuelismo, especialistas en arraigos y otras divisiones del crimen organizado, traficantes de fianzas, coalición con jueces, corrupción de ministerios, distribución de sicarios y otros delitos del mismo o parecido tenor.
Enviados del cuartel general de la Academia pusieron en manos de don Vittorio dos copias del mismo documento. Una estaba en un bolsillo de Santapaola. La otra, debajo de la cama donde dormía Emmanuello antes de dirigirse a la ventana. Las copias, tituladas “Instruziones”, son traducciones al vapor de un original en papel membretado. Las instrucciones son:
1. Favorecer que el ministerio saque la pata con elegancia, para evitar que quede con la cara astillada.
2. Favorecer que el prisionero resulte lo menos pateado posible.
3. Favorecer que el juez no salga majado. O sólo lo indispensable, para no arraigarlo en su juzgado.
4. En orden al cumplimiento del apartado número tres, favorecer que el juez del conocimiento suspenda de inmediato la búsqueda de los 500 millones prófugos.
5. Favorecer en grado de convencimiento que el susodicho juzgador devuelva ese, aquel y cualquier otro avalúo a sus respectivos evaluadores, con la finalidad de que el mencionado susodicho pueda llegar a la decisión de monto indeciso e indocumentable, y por ende invisible, respecto de los perjuicios a la herencia inmobiliaria que recibió la signora.
6. Favorecer la evaporación inmediata y definitiva de los delitos de ejercicio “abusante” de la profesión y descalificación sin condiciones de todas las calificaciones, excepto la de reducción de terrenos con destinos ignorados. Subsanar esta ignorancia para poder dictar sentencia.
7. Favorecer el ausentismo de los cittadinos patricios, estén con Emiglio o donde se les ocurra estar.
8. Favorecer la lubricación del fanatismo subvencionado con el fin secundario de que el dicho fanatismo recurra al elogio de la pata, o las patas, si son Múltiples; condene todo tipo de elegancia y someta al ministerio, al prisionero, al tribunal ya la signora a descalificaciones mal sonantes y pronósticos lamentables incluyendo la desaparición inopinada. El fin primario es favorecer la impresión de independencia transparente con la que han procedido en este asunto tanto el ministerio, como el juez y madame.
9. Favorecer entre favorecidos y favorecedores el convencimiento de que no hay de otra. Mencionar las experiencias de mal gusto por las que han pasado los desfavorecedores.
10. Enviar copias certificadas de estos favores a los siguientes…
Dadas en la sede del… el… de diciembre de 2007.
PD Favorecer que el PRI se ponga al hablar con el rey de España.
Rúbrica. Sellos.
En las copias, transmitidas por fax, están desdibujadas las palabras que corresponden a los puntos suspensivos, según explicó don Vittorio a César Pompeyo y al reportero al regresar ayer a la banca de costumbre, procedente del aeropuerto.
Dice A qué conclusiones arriba usted, dottor, con la lectura y debate de esas notables instrucciones —preguntó el reportero.
—La ineludible —respondió el académico— es que la guerra no está en Chablekal. Lo de aquí no es nada más que piccolos empujones entre ministeriales, ejidatarios, inmobiliarios y patricios. A lo más de que podríamos hablar es de batalluelas. Las bofetadas, los pisotones y las transacciones están allá, de donde vengo, de donde vienen las instrucciones.
—¿De dónde viene, Vittorio? —puntualizó Pompeyo—. ¿De las familias mafiosas de Sicilia o de los clanes favorosos de Teotihuacán?
—Tengo la impresión, César, de que vienen de ambos. Aquí hay gato encerrado. Gatos.
