El Nápoles conquistó la Supercopa de Italia al vencer ayer 2-0 al Bolonia en la final disputada en Riad, Arabia Saudita, gracias a un doblete del brasileño David Neres, quien marcó un gol en cada mitad y fue la figura determinante del encuentro.
El torneo reunió a los campeones y subcampeones de la Liga y la Copa Italia jugadas la temporada pasada.
El primer tanto llegó al minuto 39, cuando Neres disparó de zurda desde 25 metros de distancia y dejó sin opciones al guardameta Federico Ravaglia, al incrustar el balón en el ángulo.
La anotación reflejó el dominio territorial del conjunto dirigido por Antonio Conte, que ya había generado aproximaciones previas con remates de Eljif Elmas y Leonardo Spinazzola, que fueron detenidos por el arquero
En la segunda parte, el Bolonia intentó equilibrar el desarrollo, aunque continuó con dificultades para generar peligro sostenido.
La ocasión más clara para el equipo dirigido por Vincenzo Italiano se presentó a los 10 minutos de la segunda parte, cuando Vanja Milinkovic-Savic, portero de los napolitanos, detuvo un cabezazo de Lewis Ferguson.
Poco después, al minuto 57, Ravaglia falló en la salida al entregar un pase comprometido a Jhon Lucumí, quien perdió el balón ante Neres; el brasileño definió con un toque sutil por encima del portero y sentenció el duelo.
Con este resultado, el Nápoles obtuvo su tercera Supercopa de Italia, tras las conquistas de 1990 y 2014, y se repuso de finales perdidas en 2012, 2020 y 2023.
El triunfo también representó una revancha reciente, luego de la derrota sufrida ante el Bolonia en la Serie A semanas atrás.
En el Estadio Al-Awwal Park, el campeón de Italia mostró mayor control del balón y solidez defensiva, limitando las opciones ofensivas del rival.
Este duelo contó con presencia sudamericana en ambos lados: para el Nápoles jugaron los brasileños Juan Jesús y David Neres, mientras que el Bolonia alineó al colombiano Lucumí y al argentino Santiago Castro.
Matteo Politano tuvo una oportunidad clara para ampliar la ventaja, pero su remate salió por encima del travesaño.
La consagración confirmó el buen momento que vive el club dirigido por Conte, que ha ganado siete de sus últimos nueve partidos oficiales y ocupa el tercer lugar de la liga, a un punto del Milán y a dos del líder Ínter de Milán.
El club también compite en la Liga de Campeones y en la Copa Italia.
Ahora, el equipo se tomará un descanso por las fiestas, y retomará la actividad con una visita a Cremonese, el domingo 28, en un encuentro de la fecha 17.
Por su parte, el Bolonia quedó cerca de ganar la primera Supercopa de su historia, luego de ganar la Copa Italia la campaña anterior.
La final repartió un premio económico de 11 millones de euros al campeón y cerró la actividad de la Supercopa antes de que los cuatro participantes regularicen sus partidos pendientes de la Serie A.