Las últimas semanas han circulado incontables memes de la rana René por todo México. Si has recibido alguno, apuesto a que reíste, quizás te identificaste con alguno de ellos y lo compartiste con tus amigos haciéndolo aún más viral.
Hoy quiero que reflexiones y mires esos memes desde otro punto de vista. ¿Has notado que todos tienen una frase de perdedor?, el tipo de pensamiento de alguien que no logra sus metas porque renuncia al primer obstáculo que aparece.
Propongo cambiar la frase por algo más positivo: “A veces quiero cumplir mis sueños… luego recuerdo que tengo todo y continúo trabajando hasta alcanzarlos”.
¿Te gustaría cumplir todos tus sueños?
Probablemente ya tengas hoy todo el conocimiento, las habilidades, la educación y el talento para lograr tus metas. Pero aún no las has logrado. ¿Porque?
Hay un elemento fundamental que a muchos mexicanos nos hace falta para lograrlos: laautodisciplina. Es decir, la capacidad de trabajar en forma sistemática y progresiva hacia una meta hasta lograrla. Thomas Alva Edison, Einstein, Mahatma Gandhi, Marie Curie, Mozart, John F. Kennedy, Henry Ford y George Patton tienen algo en común: la autodisciplina.
Permíteme compartirte las características del triunfador autodisciplinado, así como la versión opuesta: el perdedor indisciplinado.
Las 10 características de un triunfador autodisciplinado:
- El triunfador autodisciplinado tiene un claro sentido del PROPÓSITO. Sabe con precisión qué es lo que quiere y se dirigirá a su objetivo aunque signifique sacrificar otras cosas en la vida para conseguirlo.
El perdedor indisciplinado no sabe bien a dónde quiere llegar, no tiene metas, pasa por la vida sin rumbo, siempre buscando, nunca encontrando. Es alguien que nunca se queda mucho tiempo en algo hasta lograr el éxito.
- El triunfador autodisciplinado busca y usa los modelos positivos llamados MENTORES. Se inspira con los ejemplos de disciplina y le da real posibilidad de que si el mentor pudo lograrlo, él también lo hará.
El perdedor indisciplinado tiende a emular a las personas con logros rápidos y mágicos, piensa que el éxito puede lograrse a través de trucos, suerte o alguien conocido.
- El triunfador autodisciplinado usa el poder de su IMAGINACIÓN para preparar el camino de sus propios logros. Utiliza la técnica de formulación de metas llamada imagen sensorial, que consiste en imaginar fuertemente las recompensas del éxito con todos sus sentidos: vista, gusto, olfato, tacto y oído.
Los que carecen de disciplina tienen ideas vagas de las metas que podrían a lo mejor algún día querer lograr. Generan imágenes altamente sensoriales pero las aplican a escenas de fracaso en lugar de éxito.
- El triunfador autodisciplinado tiene una orientación sensorial POSITIVA. Espera triunfar en lugar de fracasar. De hecho no conoce el significado de la palabra fracaso. Hace hincapié en sus logros del pasado como prueba de su capacidad de éxito. Si no resulta lo que intenta, lo apunta como experiencia y sigue trabajando hacia su meta. Cada experiencia lo acerca más a su meta. Nunca pierde de vista su meta pero está abierto a nuevas maneras de intentarlo.
El perdedor indisciplinado pierde tiempo y energía rumiando sobre los fracasos del pasado. Utiliza la percepción de sus fracasos como un pretexto para no probar otra vez en el futuro, constituyéndose en un círculo vicioso negativo. Desarrolla un miedo al fracaso y el miedo de hacer el esfuerzo. Y el fracaso genera más fracaso.
- El triunfador autodisciplinado tiene una AUTOCONFIANZA inmensurable. Cree en sí mismo y en su capacidad de tener éxito. Sabe en el fondo de su corazón que lo puede lograr y nadie puede convencerlo de lo contrario.
El perdedor indisciplinado se ve obstaculizado por sus propias dudas. Ese presentimiento de fracaso lo tortura en todo lo que trata de hacer. Y efectivamente eso le cierra la posibilidad a su oportunidad de éxito.
- El triunfador autodisciplinado tiene habilidad de PLANEAR y ORGANIZARSE. Sabe cómo tomar su meta y fraccionarla en piezas que pueden trabajarse una a la vez. Sabe priorizar y hacer las más importantes al principio. Sigue estrechamente su plan.
El perdedor indisciplinado dispersa su atención y esta desorganizado, no tiene idea de que es lo próximo que va hacer o piensa en hacer tantas cosas a la vez que no puede controlarlas.
- El triunfador autodisciplinado sabe cuándo y cómo adquirir CONOCIMIENTO y la destreza esencial necesaria para llevar a cabo su meta. Está dispuesto a sacrificarse para llevar a cabo su propia educación. Muchas veces significa meses de juntar información, regresar al colegio o hablar con las personas indicadas. Tiene un fuerte compromiso por aprender lo que se necesita para llevar a cabo su meta.
El perdedor indisciplinado siempre busca el camino fácil, toma cursos de fin de semana pensando que ya está altamente calificado o escucha el consejo de una persona y piensa que con eso ya conoce todo lo necesario. Seguir el proceso de aprendizaje es “demasiado trabajo”.
- El triunfador autodisciplinado es PACIENTE. No es inhibido por el tiempo, no se queja por el ni es importante para la búsqueda de su meta. Las horas pasan como si fuesen minutos, las semanas como si fuesen días y los años como si fuesen meses. Ven al tiempo como un instrumento. Y las personas que desean triunfar tienen todo el tiempo del mundo.
El perdedor indisciplinado ve al tiempo como su enemigo, algo que hay que vencer. Los escuchara decir “quiero todo ahora, no puedo esperar”. No se dan cuenta que el tiempo pasara de cualquier modo y que si no están trabajando tras su meta igual pierden el tiempo que sienten es tan importante.
- El triunfador autodisciplinado es PERSISTENTE. Tiene todo lo que necesita para lograr su meta pase lo que pase. Es implacable en la búsqueda de sus metas y sueños propios. Cuando está desilusionado busca nueva inspiración y motivación de las imágenes sensoriales del éxito y eso es suficiente para recargar el impulso necesario para seguir adelante.
El perdedor indisciplinado es un desertor fácil, abandona cuando hay trabas. Está más interesado en divertirse que en trabajar. Aún peor encuentra imposible el poder disfrutar mientras trabaja.
- El triunfador autodisciplinado siente PLACER mientras trabaja para la meta. Se entusiasma con sus metas y se compenetra fácilmente en el trabajo que le permite llegar al objetivo. Se interesa por aprender. La pasa bien mientras emprende sus ambiciones. La palabra trabajo no existe, su trabajo es su vida y la fuente principal de placer. Cuando llega al éxito dice: “no puedo creer que soy rico haciendo esto, es tan divertido”. El éxito siempre produce más éxito. Muchos triunfadores autodisciplinados seguirían trabajando igual aunque no estuvieran ganando dinero con ello.
Para el perdedor indisciplinado el trabajo es estresante, doloroso y aburrido, es algo que debe ser tolerado entre períodos de placer. Estas son las personas que viven para el fin de semana, aceptando trabajar solamente porque les brinda el ingreso para gastar en diversión. Son las personas que no desean trabajar horas extras ni llevarse trabajo a la casa salvo si se les paga más. Tampoco trabajarán más sólo por lograr un ascenso o la posibilidad de un trabajo mejor.
Espero que el aprender ésto te inspire a tomar acción y alejarte de las ideas de perdedor. Piensa en ti mismo como un triunfador, como un campeón que puede lograr cualquier cosa. Prográmate a ti mismo para el éxito y éste llegará a tí.