Las fiestas decembrinas son probablemente unas de las más esperadas, ya sea por el reencuentro con la familia o por la tradicional cena navideña en la que muchos olvidan la dieta, para dar rienda suelta a los antojos. Pero si alguien debe estar esperando ese momento, debe ser la nueva madre, quien durante el año cuidó su alimentación para darle los mejores nutrientes al nuevo integrante de la familia.
Si bien el embarazo requiere un especial cuidado en la alimentación, el postparto y el tiempo de lactancia no parecen tan estrictos, pero la alimentación aún es clave para nutrir al bebé. No obstante, las posadas y cena de Navidad, junto a la del Año Nuevo, se perfilan como un verdadero reto para comer de manera sana.
A continuación, algunos alimentos que se deben evitar si estás llevando una lactancia exclusiva a libre demanda.
¿Puedo beber alcohol si estoy dando pecho?
Si algo caracteriza la cena de Navidad y de Año Nuevo es el brindis, con el cual se celebra la oportunidad de estar nuevamente en familia o junto amigos. Aunque hoy existen variedad de bebidas para celebrar sin alcohol, esta duda suele ser frecuente tanto en mujeres embarazadas como aquellas que se encuentran dando seno materno.
El alcohol, según diversos estudios, es un rotundo NO en la dieta de las madres, principalmente porque disminuye la producción de leche materna y es una de las bebidas que al consumirse llega directamente al torrente sanguíneo, alterando también la calidad de la leche.
También se debe considerar que el alcohol puede afectar el desarrollo neuronal del bebé, su crecimiento e incluso su sueño.
Alcohol y lactancia: ¿Cuánto tiempo esperar para dar el pecho?
No obstante, para algunas madres puede ser difícil no disfrutar de una copa de vino o un vaso de cerveza, toda vez si se han mantenido alejadas del alcohol durante el embarazo. A esto, seguramente la pregunta que sigue es: ¿Cuánto tiempo hay que esperar para dar pecho si bebí alcohol?
Algunos sitios como Mayo Clinic aclaran que, si bien ninguna cantidad de alcohol es segura durante la lactancia, en caso de consumir una medida estándar será necesario esperar al menos dos horas para la siguiente toma, pero esta recomendación aplica para cada vaso o copa ingerida.
En los Estados Unidos, se considera una bebida estándar a las siguientes cantidades:
- 12 onzas (355 mililitros) de cerveza con una graduación alcohólica del 5 %
- 8 onzas (237 mililitros) de licor de malta con una graduación alcohólica del 7 %
- 5 onzas (148 mililitros) de vino con una graduación alcohólica del 12 %
- 1,5 onzas (44 mililitros) de licor con una graduación alcohólica del 40 %
¿Qué alimentos no debo consumir si esto amamantando?
Otro alimento que se debe evitar en la temporada es el pescado azul, pues algunos acumulan altos niveles de mercurio, un metal pesado que puede afectar el desarrollo del sistema nervioso del bebé, especialmente en el cerebro en crecimiento.
También se debe considerar que algunos alimentos pueden cambiar el sabor de la leche materna, por lo que su consumo debe ser moderado y es necesario observar al bebé después de las tomas. El consejo aplica también en los condimentos o comidas con sabores fuertes.
En el caso de algunos condimentos irritables, algunos bebés pueden experimentar, además del cambio de sabor, cólicos.
Entre los alimentos que pueden presentar molestias digestivas en el bebé se encuentran la coliflor, brócoli y la col. Sin embargo, también el consumo excesivo de lácteos en la dieta de la madre puede generar cólicos, por tanto, sería conveniente evitar la ensalada navideña o las pastas con demasiada crema.
¿Café y lactancia? Así es como la cafeína afecta al bebé
El café es otra de las bebidas poco recomendables durante la lactancia, sin embargo, ¿puede una madre moderna con pocas horas de sueño sobrevivir a la rutina sin café? Probablemente muchas respondan que no, por lo que una taza al día no representaría mayor problema.
Con todo, hay que considerar que la cafeína es un estimulante que pasa directo a la leche materna, afectando con ello el sueño del bebé, lo que puede causar que se ponga más irritable y nervioso durante el día, por lo que sería una buena idea considerar el consumo de un descafeinado, o bien limitar la cafeína a una taza al día.
En cualquier caso, la moderación es un punto clave en la lactancia y algo que no debe perderse de vista es que si mamá está bien, el bebé también lo estará, por lo que incluir elementos saludables a la dieta no representaría mayor problema para disfrutar de la cena de Navidad y Año Nuevo, siempre con moderación.
Además, la lactancia es un proceso dinámico y que no todos los bebés son iguales, por lo que se recomienda comer con moderación y, si no se está segura en algo, consultar con tu pediatra o asesor de lactancia.
La lactancia materna es el primer alimento de los bebés y donde adquiere sus primeras defensas contra el mundo, por lo que en esta primera Navidad de tu pequeño recuerda celebrar tu esfuerzo y sobre todo disfrutar de ese primer contacto. ¡Tú puedes, mamá!