A casi una semana del hallazgo del cuerpo sin vida de Gregory Morales, militar visto por última vez en la base militar de Fort Hood; la familia de Vanessa Guillen, soldado desaparecida  en abril pasado, ofrecieron una rueda de prensa en la citada base para exigir a las autoridades respuestas sobre el caso de su hija.

Gloria Guillen, madre de Vanessa, acusó a las autoridades de Fort Hood de montar “un show mediático”, cuando su investigación inició semanas después de que el caso de su hija llegara a los medios de comunicación y no cuando fue reportado.

El caso de Vanessa Guillen, un “show”

A principios de junio, Gloria contó en entrevista que su hija le había confesado que estaba siendo víctima de acoso sexual por parte de un sargento de la base, ubicada en Killen (Texas).

Unos días después, Vanessa fue vista por última vez cuando caminaba por el estacionamiento de la base; sus objetos personales fueron encontrados en su carro y supuestamente se le buscó por los alrededores del complejo militar.

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Más tarde a Vanessa se le clasificó como “desertora”, algo que la familia reclamó pues su hija no había regresado a casa ni se había contactado con ellos.

Yo quiero a mi hija viva, en mis brazos, a mi lado. Porque si no, no sé qué sería  de mí”, reclamó Gloria ante los micrófonos de diversos medios de comunicación, tras un recorrido por la base militar de Fort Hood.

También acusó a los militares que presuntamente investigan el caso de Vanessa de “montar un show”, aun cuando ella ya les había dado el nombre de una persona para investigar. Reclamó que el lugar no haya sido cerrado y tampoco se inició una investigación a los teléfonos de los sargentos de la base.

“Mi hija aparece muerta, cierro la base”

Desesperada, afligida, pero con fuerza en su hablar, la mujer incluso pidió hablar con Donald Trump -el más alto mando militar- para esclarecer la desaparición de su hija, “a la que quiero viva”.

“Porque si Dios no lo quiera, mi hija aparece muerta, cierro esta base”.

Por su parte, Rogelio Guillenpadre de Vanessa- reconoce que las esperanzas de recuperar a su hija con vida son pocas, pero la familia quiere al menos tener su cuerpo para despedirse.

Cerrarían el caso por falta de pistas

Trascendió que ante la falta de pistas, el caso de Vanessa Guillen –por el que se ofreció una recompensa de miles de dólares- sería cerrado por parte de las autoridades de Fort Hood.

 No obstante, algunas asociaciones sin fines de lucro que luchan por los derechos de las familias de personas desaparecidas acusan que el caso debió quedar desde el principio en manos de las autoridades de Texas y no de los militares de la base involucrada.

Reclaman que el de Vanessa no sería el primer caso de una militar que tras sufrir el acoso de un superior es secuestrada, violada y asesinada.- Con información de El Mañana, Mundo Hispánico, El Diario N.Y. y Excelsior.