WASHINGTON.— El presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, se aferra a su acusación, sin evidencia, de “fraude electoral” y regresó este domingo a su club de golf privado de Sterling, Virginia, sin reconocer su derrota en las elecciones del martes pasado
A su vez, el presidente electo Joe Biden anunció a su equipo de transición, tras acudir a misa y visitar el cementerio donde están su primera esposa e hijo, en el complejo católico del valle de Brandywine, en Wilmington, Delaware.
Sordo a las celebraciones que se prolongaron hasta la noche en Washington, y que se concentraron frente a la plaza donde se encuentra la Casa Blanca en el centro de la capital estadounidense, Trump volvió a salir temprano esta mañana hacia su club de golf.
Si el sábado emitió un comunicado en el que subrayaba que “las elecciones aún no habían finalizado” y denunciaba, de nuevo sin evidencias, “fraude electoral”, hoy simplemente se limitó a citar a dos periodistas de Fox, su canal favorito, que alegan irregularidades.
“We believe these people are thieves. The big city machines are corrupt. This was a stolen election. Best pollster in Britain wrote this morning that this clearly was a stolen election, that it’s impossible to imagine that Biden outran Obama in some of these states.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 8, 2020
Sin llamada de aceptación
Históricamente, una vez que los medios de comunicación proyectan el resultado definitivo en las elecciones de EE.UU., al cabo de unas horas, el derrotado suele llamar al candidato victorioso para felicitarlo.
No obstante, parece que Trump, quien se ha caracterizado por su rechazo a las tradiciones políticas, no tiene previsto reconocer la derrota en el corto plazo.
Una de las asesoras de Biden, Symone Sanders, indicó este domingo que “varios republicanos” del Congreso se han puesto en contacto con el presidente electo, pero nadie del círculo cercano de Trump.
“Creo que la Casa Blanca ha dejado claro cuál es su estrategia aquí y que van a continuar participando y agitando estos planes, en muchos casos sin base, legal”, comentó Symone Sanders en una entrevista en la cadena CNN.
Uno de los pocos republicanos que sí salió a felicitar a Biden fue el excandidato presidencial en 2012 y senador, Mitt Romney, quien mostró su disposición a trabajar con el presidente electo.
“Me gustaría ver una salida más elegante (de Trump) pero no es parte de su carácter”, reconoció Romney.
También, en una entrevista con la cadena Fox News, Romney dijo estar de acuerdo con que Trump pelee en tribunales los resultados electorales, pero “debería bajar el tono de su retórica pública”.
“Creo que es apropiado que el presidente se asegure de que el escrutinio de votos se ha hecho correctamente, que lleve a cabo recuentos donde es una contienda muy reñida, si hay supuestas irregularidades perseguirlas y seguir todas las opciones legales que tenga. lo que cabría esperar de un presidente en un entorno como este “, indicó el senador por Utah.
“Al mismo tiempo, creo que es importante elegir las palabras con cuidado porque los ojos de nuestros hijos están sobre nosotros, los ojos del mundo están sobre nosotros”, apuntó.
Romney says Trump should 'follow every legal option he has,' but choose words 'carefully' https://t.co/ww9ZWdeHvp
— Fox News (@FoxNews) November 8, 2020
Republicanos mudos
Además del silencio de Trump, sorprende el de los principales líderes republicanos, quienes tampoco se han pronunciado al respecto.
Es el caso de Mitch McConnell, el líder de la mayoría conservadora en el Senado y uno de los pesos pesados del partido, quien ha evitado comentar, por el momento, la victoria de Biden.
Por su parte, el líder de la minoría republicana en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, insistió hoy en que “todos los votos legales deben ser contados, todos los escrutinios completados y todas las objeciones legales escuchadas”.
“Solo entonces EE.UU. decide quién ha ganado las elecciones”, remarcó en la cadena Fox.
Pese a que hay estados en los que el reñido resultado obliga a un recuento, como es el caso de Georgia, lo cierto es que la capacidad legal de disputa de Trump es limitada ya que la ventaja lograda por el demócrata es considerada irreversible.
