BASE AÉREA AL-ASAD, Irak (AP) — El presidente estadounidense Donald Trump realizó el miércoles una visita sorpresa a los soldados estadounidenses estacionados en Irak, donde anunció que no tiene “absolutamente ningún plan” de retirarlos de allí.
Es el primer viaje de Trump a una región en guerra, y se realiza poco después de que anunció la retirada de las fuerzas estadounidenses apostadas en Siria.
Declaró que quiere que los militares estacionados en Siria regresen a casa, pero que Irak puede usarse como plataforma para lanzar ataques contra el grupo Estado Islámico.
Trump, en conversación con reporteros que viajaban con él, dijo que Estados Unidos puede atacar al EI “tan duro y tan rápido” que ellos “ni siquiera se darán cuenta de qué demonios ocurrió”.
