CIUDAD DE MÉXICO.- Ayer se encontró el cadáver de la escort Laura Cristina Ovalle Quintero, de origen colombiano, en un departamento del complejo “Grand Tower”, en la colonia Ampliación Granada, alcaldía Miguel Hidalgo.
Su madre, Liliana Quintero, rogó al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, que la ayude para que el crimen “no quede impune”.
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Quería estar con su hija
La señora, quien vive en Medellín, aseguró que la aerolínea Interjet le cobra 600 dólares para cambiar un boleto que ya había comprado y venir a México “para estar con mi hija”.
Entrevistada por Ciro Gómez Leyva, Liliana Quintero indicó que las autoridades mexicanas no se han puesto en contacto con ella.
Laura Cristina tenía 31 años de edad y nació en Ibagué (Tolima), en el oeste de Colombia. Su apartamento en México era el 45 de “Grand Tower”, en las calles de Lago Neuchatel y Lago Andromaco.
El hallazgo del cuerpo en el lujoso inmueble tiene alarmadas a las autoridades de Ciudad de México.
Ninguno de los moradores de esa unidad residencial ha confesado a las autoridades cuáles serían las posibles causas del fallecimiento.
Indicios de violencia
Según el reporte de las autoridades mexicanas, el cuerpo lo encontró la empleada de servicios generales del edificio; presentaba múltiples golpes en su cabeza, al parecer, propinados por desconocidos.
Medios de ese país también informaron que la mujer fue hallada boca abajo, ensangrentada y en una residencia del segundo piso.
La Policía de Ciudad de México ya verifica las cámaras de seguridad de las zonas aledañas para conocer si se trató de un homicidio y a los autores.- Con información de Notimex y “El Universal”