SAN FRANCISCO DE CAMPECHE.— El presidente Andrés Manuel López Obrador dio ayer el banderazo para el inicio de los trabajos del tramo 2 del Tren Maya, del cual destacó que permitirá la ansiada integración de la región Sur-Sureste al desarrollo nacional.
El mandatario encabezó en Campeche una gira de trabajo que incluyó la reunión de seguridad, donde se destacó que la entidad sigue siendo la de menor incidencia delictiva y, por ende, la más segura del país.
López Obrador, acompañado del gobernador Carlos Miguel Aysa González, subrayó que el proyecto del Tren Maya será el detonante de la actividad turística y económica.
Además, continuó, es la respuesta a las políticas neoliberales que llevaron a la privatización del servicio ferroviario desde hace tres sexenios.
El presidente precisó que el tramo 2, Escárcega-Calkiní, abarca 236 kilómetros y lo construirá Grupo Carso (propiedad de Carlos Slim), que se adjudicó la licitación al presentar la mejor propuesta con un presupuesto que no rebasará los $18,000 millones y se hará en 28 meses.
En las instalaciones de la Planta de Impregnación de Durmientes, en Escárcega, el tabasqueño aseguró que ninguna persona será perjudicada con la obra, que “está plenamente basada en principios sustentables”.
De manera paralela, señaló, se sembrarán en la región 600,000 hectáreas de árboles frutales y maderables, lo que dará empleo a 150,000 campesinos comuneros.
De hecho, corrigió que anteayer, en el evento similar que sostuvo en Yucatán, erró la cifra al señalar que eran 300,000 hectáreas.
En general, subrayó, el proyecto generará 800,000 empleos que se procurará sean en su mayoría para habitantes de los estados incluidos.
También destacó la importancia cultural e histórica de la región y de nuevo calificó a la antigua ciudad maya de Calakmul como un privilegio y que es el “Nueva York del área maya”.
López Obrador indicó que con el Tren Maya los 10 millones de turistas que arriban a Cancún tendrán el privilegio de conocer sitios arqueológicos de Quintana Roo, Yucatán, Campeche y Chiapas.
En el acto presentó como su representante del proyecto “sin percibir honorarios” al empresario Daniel Chávez.
Destacó su amistad y apoyo al gobernador Aysa González, a quien llamó su “paisano de región” y desde un principio respalda estas acciones.
Antes, el gobernador calificó el proyecto del Tren Maya como la obra contemporánea más grande de esta región del país.
Reiteró su respaldo al asegurar que no hay mejor política que la del trabajo y la honestidad que busca el progreso para todos y no solo para grupos.
Por su parte, Rogelio Jiménez Pons, titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y director del proyecto, señaló que esa dependencia, en conjunto con la Sedatu, invertirán adicionalmente $126 millones para el mejoramiento urbano de Escárcega.
Las obras, explicó, incluyen construcción de drenajes, rehabilitación de calles, parques y plazas.
Además, concluyó, se establecerán los talleres de reparación de locomotoras, furgones y de rodantes del proyecto, lo que generará empleos y bienestar.— Martín Acosta Pacheco
Tren Maya Mensaje a opositores
AMLO pidió a opositores al Tren Maya respetar la decisión “del pueblo que votó en favor”.
Justicia y protección
La obra, según dijo, no solo traerá justicia al sureste mexicano, sino que además protege el medio ambiente.
“Necesaria y de justicia”
A los opositores, dijo, tienen todo su derecho de manifestarse, de expresarse, pero “es una obra necesaria para el sureste, es de justicia, y además para proteger el medio ambiente, muy contrario a lo que ellos sostienen”.
Sin impedimentos
A diferencia del nuevo aeropuerto en Santa Lucía, Estado de México, donde sus opositores presentaron 80 amparos, en esta obra no existe ningún impedimento legal que lo detenga.