PROGRESO.-  El norte del frente frío 23 azotó las costas de Yucatán a las 7:25 horas de este viernes con vientos de 30 a 40 kilómetros por hora, acompañado de torrencial aguacero que duró media hora,  lo que trastornó las actividades matutinas y afectó las labores en varias escuelas de preescolar.

Los vientos del norte se intensificaron durante la mañana los cuales alcanzaron velocidades de 50 a 60 kilómetros por hora y rachas de 70 kilómetros por hora. Ante ese panorama la Capitanía Regional de Puertos ordenó a partir de las 12 horas el cierre de los puertos a la navegación mayor.

Cierran puertos de Yucatán por frente frío 23

Todos los puertos de Yucatán quedaron cerrados a la navegación menor y mayor, se suspendió la salida de todas las embarcaciones pesqueras, así como el arribo de los barcos mercantes, graneleros y buquetanques, debido a que no pueden realizar maniobras en el canal de navegación del puerto de altura.

Efectos del frente frío 23 en Progreso

Como se había pronosticado el norte azotó este viernes, sus efectos se comenzaron a sentir a partir de las 6:30 de la mañana, una hora después comenzó a azotar, de pronto quedó nublado y cayó fuerte aguacero que se prolongó durante media hora, numerosas personas fueron tomadas por sorpresa por la lluvia, muchos viajaban en motocicletas a la escuela y centros de trabajo.

Debido a la repentina lluvia, muchos niños de preescolar no pudieron llegar a tiempo en las escuelas a donde debían de entrar a las 8 de la mañana, de modo que hubo ausentismo escolar.

El mal tiempo afectó la actividad pesquera, marítima y portuaria, los pescadores suspendieron la pesca por las fuertes marejadas y vientos, los barcos mayores no pudieron arribar ni zarpar de la terminal remota donde por los vientos se tomaron precauciones para evitar accidentes.

La jornada turística en el malecón también se vio afectada por las marejadas y vientos, los prestadores de servicios retiraron mesas, sillas, sombrillas y camastros que habían colocado para recibir a los visitantes que llegaban, quienes por el frío causado por el temporal no permanecieron mucho tiempo en la playa. Los restaurantes recibieron visitantes y colocaron ventanas para resguardarse de los vientos.

El mal tiempo afectó las instalaciones eléctricas, en los postes las líneas y los transformadores comenzaron a echar chispas, los vecinos comenzaron a temer que de un momento a otro haya cortos circuitos, se desplomen cables y se suspenda el servicio como ocurrió durante a navidad que dejó a numerosas familias sin luz.- GABINO TZEC VALLE.