Las decisiones que se han tomado en el caso del “paso deprimido” han sido lo más objetivas posibles, buscando siempre el mayor beneficio para la ciudadanía, aseguró ayer el alcalde Renán Barrera Concha.
“Si fuese cuestión política, los criterios hubieran sido otros”, añadió.
Ayer publicamos que ante el anuncio del proyecto elegido para el rescate del túnel de Prolongación Paseo de Montejo con Circuito Colonias, el senador Jorge Carlos Ramírez Marín, precandidato del PRI a la alcaldía, dijo que le daba mucho gusto que al fin se plantee una solución al problema, pero no puede concebir que no se le haya dado el mantenimiento adecuado a esa obra durante casi una década.
“Es falso que no se le haya dado mantenimiento”, puntualizó Barrera Concha. “Desde su inauguración, en octubre de 2011, se han invertido 14.8 millones de pesos entre mantenimiento y reparaciones”.
Según explicó, tomando en cuenta que en la obra se invirtieron oficialmente 64.4 millones de pesos, el costo total con lo que se ha gastado en mantenimiento y reparaciones “asciende a casi 80 millones de pesos”.
Tiempos políticos
Después de realizar un recuento de los gastos en reparaciones y mantenimiento, que va desde la reparación de las rejillas y el pago de consumo de energía eléctrica de las bombas, hasta los daños que causaron las inundaciones del año pasado, Barrera Concha dijo que entiende que “estamos en tiempos políticos”, pero lamenta que se pretenda “confundir a la ciudadanía”.
“Que quede claro que por más que se busque confundir, el Ayuntamiento ha hecho lo que está a su alcance para poder darle vida al ‘paso deprimido’ y ahora se hará una ‘cirugía mayor’ para darle solución definitiva”.
Decisión técnica
Recordó que desde la concepción de la obra hubo implicaciones políticas, por la oposición ciudadana y las agresiones, pero precisamente por ese motivo “pedimos el apoyo del Colegio de Ingenieros para hacer estudios y propuestas, para tomar una decisión objetiva, técnica, no política”.
También reiteró que cuando se recurrió “a la opinión de expertos” fue “buscando que la inversión (que se efectuará en las reparaciones) sea para el beneficio mayor de las personas”.
Negó asimismo que el “paso deprimido” se haya mantenido cerrado tantos meses “por cuestión política”.
“Nada más falso”, puntualizó. “Se cerró (en octubre pasado) por los daños de las inundaciones de ‘Delta’ y ‘Gama’, porque el nivel de agua casi llegó a tres metros de profundidad y las paredes empezaron a filtrar agua, con riesgo de colapso”.
Cierre por seguridad
Según explicó, el túnel se cerró al tránsito vehicular “por motivos de seguridad”, por los riesgos de la presión del agua, que salía como si fuera una fuente y terminó de romper el cárcamo, que ya tenía fracturas de las inundaciones anteriores.
“Ahora, después de conocer los estudios y propuestas de expertos, estamos trabajando para hacer una reapertura segura con una inversión de 25 a 30 millones de pesos”, añadió.— AIM
“Paso deprimido” Cronología de reparaciones
Desde su inauguración se han invertido $14.8 millones entre mantenimiento y reparaciones.
Rejillas peligrosas
Según Renán Barrera, cuando llegó a la alcaldía en 2012, lo primero que se reparó fueron las rejillas, que eran peligrosas porque se pandeaban. En marzo de 2013 se sustituyeron por nuevas, de una aleación especial de metal, con inversión de 700,000 pesos.
Gasto en las bombas
En marzo de 2012, con $600,000 se instalaron bombas adicionales, más potentes; en noviembre de 2014 se gastaron $300,000 en mantenimiento, y otros $200,000 en marzo de 2015, ya que trabajan día y noche. Además, en 6 años se pagaron $9.3 millones en consumo eléctrico de las bombas.
Las inundaciones
A raíz de las inundaciones de 2020 se gastaron más de 3.5 mdp.