TIZIMÍN.— La explotación infantil en el municipio continúa siendo una realidad alarmante que data desde hace años, con menores de edad trabajando en las calles, muchas veces sin la supervisión de un adulto o en condiciones vulnerables que ponen en riesgo su integridad.

En Tizimín es común ver a niños y adolescentes recorriendo colonias o el centro de la ciudad ofreciendo dulces, chicharrones o frutas de temporada, ya sea bajo el cuidado de sus padres o por cuenta propia.

La situación es muestra de la pobreza que aún prevalece en la periferia e incluso en la zona sur, donde menores han dejado la escuela y se dedican a trabajar con sus padres, en labores domésticas o en negocios.

Dos casos recientes han encendido las alertas entre la ciudadanía. El primero ocurrió la semana pasada, cuando un niño de tan solo nueve años fue encontrado dormido sobre las bancas de un sitio de taxis, frente al parque Juárez.

El menor se encontraba solo y en aparente situación de calle, lo que motivó la intervención de la Policía Municipal.

El segundo caso se registró apenas hace un par de días, cuando menores fueron rescatados por las autoridades luego que vecinos reportaran que vivían sin el cuidado de sus padres y en compañía de personas extrañas.

Aunque no se ha confirmado oficialmente, trascendió que uno de los menores habría sido víctima de abuso sexual.

En medio de este delicado problema, el Ayuntamiento instaló el pasado martes el Comité del Sistema de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes (Sipinna), con el objetivo de establecer acciones para garantizar el respeto a los derechos de la infancia.

Además del alcalde Adrián Quiroz y la presidenta del DIF local, Lina Fernández, en el evento estuvo Irene Torres Ortegón, secretaria ejecutiva de Sipinna en Yucatán.

Se recalcó el trabajar de manera coordinada con cada dependencia y en todas las comisarías para prevenir casos que afecten los derechos de los menores.

Colaboradora de Megamedia en municipios del oriente de Yucatán desde junio de 2009. Cubre noticias generales en las comunidades de esta región: política, gobierno, campo, ganadería, sucesos policíacos, religión, artes y cultura.